En la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se realizaba ayer una asamblea convocada por estudiantes para analizar la reforma judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador, que se discute en el Congreso, para tomar una postura al respecto. Sin embargo, transcurridos unos minutos de la misma, en la entrada de esa institución, varios jóvenes llegaron con bocinas y a todo volumen se pusieron a bailar, lo que motivó el fin de la reunión.

Los alumnos Tonatiuh Guillem, Miriam Estrada y Álex Gallegos, parte de los convocantes, manifestaron que “las autoridades de la facultad mandaron a sus porros a reventar la asamblea, porque ellos quieren realizar un paro de labores y dar la idea de que todos los estudiantes, los 17 mil que somos, rechazamos la reforma”.

Gallegos explicó que “los porros que llegaron a reventar la asamblea son del denominado grupo Invictus, que obedecen órdenes de la dirección de la facultad. Se les conoce como ‘los porros perfumados’ y responden a intereses de las autoridades”, denunciaron.

Los estudiantes repartieron más de 600 cuestionarios a alumnos de la facultad para que expresen su opinión sobre la reforma y los depositen en urnas. Nos vamos porque no vamos a caer en la provocación.

Vamos a convocara una nueva reunión para informar sobre la consulta, pero ya no será esta semana, sino hasta la próxima, dijo Gallegos.

Los alumnos se reunieron con representantes de la directora de la facultad, Sonia Venegas, de rectoría y personal de seguridad de la máxima casa de estudios, a quienes entregaron un pliego petitorio de ocho puntos, entre los que resaltan que los funcionarios universitarios se abstendrán de participar o promover actividades políticas contra la reforma judicial y la apertura de todos los auditorios o recintos que se soliciten para analizar objetivamente la iniciativa.