Tegucigalpa. La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, denunció anoche un golpe de Estado en curso, en medio de una polémica por su decisión de cancelar el tratado de extradición con Estados Unidos, que permitió el encarcelamiento de peligrosos narcotraficantes.

Ratifico que la paz y la seguridad interior de la República están en riesgo por un nuevo golpe de Estado que el pueblo debe detener, dijo la mandataria izquierdista en cadena de radio y televisión, horas después de que se publicó un video en el cual aparece su cuñado en una reunión con narcos en 2013 pidiendo aportes para la campaña electoral de ella ese año.

El plan para destruir mi gobierno socialista y democrático está en marcha, acusó, y advirtió que “el plan de solución contra el crimen y las ejecuciones demuestra nuestra política a favor de la extradición, pero no permitiré que se instrumentalice de forma selectiva el tratado vigente con Estados Unidos para desarticular las fuerzas armadas, derrocar mi gobierno y destruir las elecciones.

Las fuerzas oscuras de 2009 con la mediática nacional e internacional se reorganizan, aseguró al aludir a la asonada contra su esposo, el ex presidente Manuel Zelaya (2006-2009), y destacó que condena todo tipo de negociación entre narcotraficantes y políticos, de acuerdo con Telesur.

Castro puso fin hace una semana al tratado con Estados Unidos, al acusar de injerencia a la embajadora estadunidense en Tegucigalpa, Laura Dogu, en la política hondureña hacia Venezuela.

La diplomática manifestó preocupación por una reunión que el ministro de Defensa, José Manuel Zelaya, sobrino del esposo de Castro, y el máximo jefe de los militares hondureños, general Roosevelt Hernández, tuvieron con el ministro de Defensa venezolano, general Vladimir Padrino López.

El sábado renunció el ministro José Manuel Zelaya después de que su padre y cuñado de la presidenta, el secretario del Parlamento, Carlos Zelaya, hizo lo propio, tras admitir que tuvo un encuentro con narcotraficantes en 2013.

La oposición afirmó que Castro canceló el tratado que permitió encarcelar a medio centenar de narcotraficantes hondureños, incluido el ex presidente de derecha Juan Orlando Hernández (2014-2022), hoy preso en Estados Unidos, para proteger a miembros de su gobierno y de su familia.

Un portal especializado publicó ayer un video de la reunión entre Carlos Zelaya y narcos.