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Angelina Jolie y Pablo Larraín llevan Maria al festival de cine de Venecia

Cinta biográfica de una de las más grandes cantantes de ópera de todos los tiempos

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▲ Maria Callas en la Juilliard School del Lincoln Center, en 1972. Sobre estas líneas, Angelina Jolie en la alfombra roja de la cinta Maria.Foto Ap y Afp
 
Periódico La Jornada
Viernes 30 de agosto de 2024, p. 6

Venecia. La soprano griega Maria Callas se convirtió en protagonista de la edición 81 de la Mostra de Venecia, a casi 47 años después de su muerte, por su película biográfica titulada Maria, del chileno Pablo Larraín, en la que Angelina Jolie interpreta a la diva.

Para la actriz estadunidense, recrear la figura de la famosa cantante de ópera Maria Callas significó más de lo que puede expresar con palabras; además, espera no defraudar a los fanáticos de Callas con su actuación.

Sentí un gran privilegio al experimentar que llegué a conocer a esta mujer y pude estar dentro de su piel por un momento. Realmente me preocupo profundamente por ella, dijo Jolie ayer, pocas horas antes del estreno mundial de la película en el Festival Internacional de Cine de Venecia.

La película fue adquirida porNetflix para su distribución y se centra en la última semana de la vida de Callas en 1977, en París, momento en el cual la cantante estuvo profundamente aislada, con sólo su mayordomo y su criada cuidándola, preocupados por su salud, las drogas y los devastadores efectos dominó de su voz disminuida.

Durante siete meses, Jolie tuvo que aprender a cantar ópera para interpretar a Maria Callas, y admitió que éste ha sido el papel más exigente de su carrera.

Pensé que podía cantar como lo hace la gente en las películas, fingiendo o cantando un poco, y desde el principio me quedó muy claro que iba a tener que aprender hacerlo de verdad porque no se puede fingir que se canta ópera, compartió la actriz en conferencia de prensa. También fue renuente al comparar la fama de la época de Callas con el momento presente.

“Yo no viví entonces. Supongo que era difícil o fácil de diferentes maneras. Fue celebrada como una de las artistas más maravillosas y también le arrojaron comida, la insultaron y le mintieron. Así que no lo sé. Debió sentirse muy sola.

En los primeros días, Larraín fue muy bueno conmigo en el sentido de que comenzamos de una manera más íntima con muy pocos miembros del equipo de filmación. Terminamos en La Scala con todos. Así que tuve poco de tiempo para no ponerme nerviosa. Pero esto es lo más difícil que he hecho en mi vida. Estaba aterrorizada, explicó Angelina Jolie.

El realizador también comentó que cuando se escucha a Callas en la película en su mejor momento, 95 por ciento está tomado de las grabaciones originales de la soprano, pero cuando la escuchamos al final de su vida, es sobre todo la propia voz de Jolie la que estamos oyendo.

La estrella estadunidense ha aparecido en más de 60 películas, incluyendo éxitos de taquilla llenos de acción y dramas cargados de emoción, y ganó un Oscar a Mejor Actriz de Reparto por su papel en la película de 1999 Girl Interrupted.

El director chileno Pablo Larraín continúa explorando las vidas trágicas de mujeres muy famosas. En 2016, llegó al festival con su retrato de Jackie Kennedy, Jackie, protagonizado por Natalie Portman como la primera dama tras el asesinato de su esposo.

En 2021, regresó con Kristen Stewart interpretando a la princesa Diana cuando consideraba divorciarse durante unas vacaciones de Navidad, en Spencer. Ambas cintas le valieron a sus protagonistas nominaciones al Oscar a la mejor actriz.

Maria es la llamada conclusión de esta trilogía de mujeres históricas, aunque Callas puede ser un poco menos conocida para las generaciones más jóvenes. Su nombre de pila era Maria Kalogeropoulos; nació de padres griegos en Nueva York e hizo su debut profesional en Atenas a los 17 años.

Durante su breve vida se convirtió en una de las más grandes cantantes de ópera de todos los tiempos con su inigualable voz y presencia escénica. Pero los elogios también llegaron con el intenso escrutinio de su vida en el ojo público, ya sea por sus exigencias y su comportamiento de diva, su peso o su vida romántica.

El 2 de agosto de 1947 cae el telón tras el último acto de La Gioconda de Ponchielli, dirigida por el maestro Tullio Serafin en la Arena de Verona. La ovación que estalla en el público certifica el nacimiento de una estrella en la persona de Maria Callas.

En 1949, la diva de la óperase casó con Giovanni Battista Meneghini.

En 1954, después de perder 30 kilos, la soprano se convierte en una diva absoluta, actuando en las más grandes óperas sin escatimar esfuerzos con su voz.

El 2 de enero de 1958, Maria Callas abre la temporada en la ópera de Roma; al final del primer acto de Norma, asegura que se ha quedado sin voz y se niega a continuar. La dirección denuncia un capricho de la diva y el público recibe con silbidos algunas de sus arias.

Unos momentos después, se explicó con elocuencia ante la prensa: Al final del primer acto, me quedé afónica. Como pueden constatar, ya no puedo hablar.

En 1959, conoce al armador griego Aristóteles Onassis y se separa de Meneghini. Empiezan nueve años de amor apasionado.

Pero el idilio termina en 1968, cuando el industrial naviero se casa con Jackie Kennedy, viuda del ex presidente estadunidense John F. Kennedy. Tres años antes, la diva se había despedido de la ópera.

El 16 de septiembre de 1977, Maria Callas muere en su domicilio parisino por una crisis cardiaca a los 53 años.

Desde que obligó a la ópera a recordar que también era una manifestación teatral, ya no fueron aceptables los desfiles de cantantes rollizos que simplemente interpretaban sus arias en el frente del escenario, escribió a la prensa en el momento de su muerte.