Viernes 23 de agosto de 2024, p. 18
Toronto. El gobierno de Canadá obligó a las dos más grandes compañías ferroviarias del país a iniciar un proceso de arbitraje contractual con su sindicato, para terminar con el paro de labores por parte de sindicato y empresas que comenzó a primera hora del jueves y amenazaba con afectar la cadena de comercio con Estados Unidos.
El ministro de Trabajo Steven MacKinnon anunció la decisión en una conferencia de prensa, momentos después que la agencia de noticias The Associated Press dio a conocer la noticia con información recibida por un funcionario de gobierno al tanto de la situación.
Canadian National y Canadian Pacific Kansas City (CPKC) suspendieron sus actividades después de que venció el plazo de las 00:01 horas (hora del Este de Estados Unidos) para resolver el conflicto con el sindicato Teamsters Canada Rail Conference, que representa a unos 10 mil trabajadores del sector.
El sindicato afirma que el principal obstáculo para un acuerdo son las exigencias de las empresas, más que las propuestas sindicales, pues afirma que las compañías tratan de debilitar las protecciones en torno a los periodos de descanso y los horarios de los trabajadores ante la falta de empleados, lo que aumenta el riesgo de problemas de seguridad relacionados con el cansancio.
Las conversaciones se reanudaron en el transcurso de este jueves, mientras los trabajadores se manifestaban en el exterior y los grupos empresariales instaban al gobierno a forzar el arbitraje.
Como ministro de Trabajo he ordenado a la Junta de Relaciones Industriales de Canadá que ayude a las partes a resolver los términos pendientes de sus convenios colectivos mediante la imposición de un arbitraje vinculante final
, dijo MacKinnon en conferencia de prensa. Agregó que también ordenó a la Junta que extienda la duración de los convenios colectivos actuales hasta que se firmen nuevos contratos.
Más temprano, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, aseguró que su gobierno se toma en serio la huelga ferroviaria y trabaja para encontrar una solución que beneficie a la economía.
Todo el transporte de mercancías de Canadá por vía ferroviaria –cuyo valor supera mil millones de dólares canadienses (730 millones de dólares estadunidenses) al día y que sumó más de 375 millones de toneladas el año pasado– se detuvo, al igual que los envíos ferroviarios hacia Estados Unidos.