Nezahualcóyotl, Méx., La Fiscalía de Personas Desaparecidas trabajará junto con el colectivo de Madres Buscadoras, en la localización de sus seres queridos, además dará apoyo y acompañamiento en búsquedas a lo largo de la ribera del canal de aguas negras Río La Compañía, donde hace 11 días hallaron un cuerpo y otros restos humanos entre montículos de desperdicios.

Las familias y representantes de la Fiscalía General de Justicia del estado de México (FGJEM) pactaron el acuerdo el viernes por la noche, luego de casi cuatro horas de protestas en la sede regional de la fiscalía de Nezahualcóyotl, lugar donde los inconformes colocaron desechos recolectados durante la remoción en el canal de agua sucia.

En la manifestación participó María Teresa Romo Alonso, quien desde el 27 de junio busca a su nieto Edwin Jair Fuentes Bolaños, de 22 años, desaparecido en la unidad Prados Sur, en Tultitlán.

También estuvieron Ana Elvia Villegas Cruz y su hijo Gerardo Daniel Díaz Villegas, vecinos de Chimalhuacán, quienes buscan a Diana Belem Díaz Villegas, de 30 años de edad cuando se ausentó el 2 de febrero de 2019.

Otras madres, padres, hijos y nietos de personas desaparecidas estuvieron firmes a pesar de que tres días antes policías los desalojaron de estas oficinas. Exigían diálogo con el fiscal regional de Nezahualcóyotl, Elohim Díaz Jiménez, pero no lo consiguieron.

Los familiares pedían acompañamiento y el envío de maquinaria pesada para remover cientos de toneladas de basura extraída del cauce, pero también avances en las investigaciones.

El 30 de julio descubrieron un cadáver y al siguiente día encontraron más restos humanos.

Una llamada desde la oficina en Toluca del fiscal en materia de desaparecidos, Rogelio Guillermo Rueda Ramos, permitió que a las familias se les escuchara.

Patricia Reyes, titular del segundo turno de la fiscalía de desaparecidos, ofreció los avances de la indagatoria. Fue entonces cuando los buscadores se enteraron de las irregularidades en la integración de la carpeta de investigación.

Mostraron su indignación ante lo encontrado en el expediente. Con conocimiento de causa, advirtieron de fallas en los peritajes. Ellas fueron testigos presenciales, tomaron video y fotos del descubrimiento.

El 31 de julio el colectivo removía escombros en la búsqueda del hijo de Jerónima Castro Sandoval, quien desapareció hace más de cinco años en esa zona de Nezahualcóyotl.

Un peritaje indicó que el cadáver es de un hombre joven y el otro de un adulto; además hay una ficha de identificación de pertenencias, en la cual se indica que la víctima tenía cercenadas las piernas.