Alejandra Valencia, Ana Paula Vázquez y Ángela Ruiz son de bronce. La primera medalla de México en los Juegos Olímpicos París 2024 llegó ayer en la Explanada de los Inválidos con cuatro disparos perfectos de la selección femenil de tiro con arco.

Sus flechas, dirigidas no sólo por el viento, sino por la esperanza de millones de aficionados, atinaron a ganar el podio en una competencia de sube y baja emocionales, donde la templanza y la seguridad fueron clave para no claudicar en los momentos inciertos.

Y sí, por momentos las arqueras titubearon con puntuaciones de seis y siete, pero también consiguieron 11 tiros perfectos, cuatro de ellos en el último set, que las llevaron a vencer a Países Bajos 6-2 en la disputa por el bronce.

La medalla conseguida por las arqueras mexicanas llegó tras un cúmulo de batallas personales enfrentadas con aplomo.

Ana Paula Vázquez se mantuvo alejada del alto rendimiento por más de un año luego de una intervención quirúrgica que casi la orilla al retiro. La oriunda de Coahuila llevó al límite su cuerpo, el brazo no le respondía y tirar una flecha era algo inimaginable. Hace apenas 10 meses, la seleccionada tuvo la fuerza para levantar las 14 libras del arco y lanzar sus primeras flechas.

La carrera de Alejandra Valencia ha transcurrido entre escándalos administrativos de la Federación Mexicana y el miedo al fracaso. En Londres 2012 finalizó en el lugar 17 y pensó en claudicar con tan sólo 17 años de edad, mientras contemplaba a sus compañeras Aída Román y Mariana Avitia subir al podio. Un cambio de chip combinado con un intenso trabajo sicológico la llevó a convertirse en lo que es hoy: una doble medallista olímpica.

Ángela Ruiz, una de las más jóvenes de la delegación nacional, tuvo dudas respecto a su ingreso a la selección mayor. Enfrentarse a los monstruos de la especialidad y ganarse un lugar fue tan complicado como abandonar su estado natal y mudarse a la ciudad de México para buscar la excelencia. Con poco más de un año como seleccionada, la coahuilense ya sabe que tiene la capacidad de medirse a las mejores y vislumbra un futuro prometedor.

En el cumpleaños 18 de Ruiz, México vio ondear por primera vez su bandera en una ceremonia que arrancó las lágrimas de las ahora medallistas.

Con sus familias en las gradas, las arqueras celebraron la cuarta medalla obtenida por la disciplina en 12 años.

En Londres 2012, Román y Avitia ganaron la medalla de plata y bronce, respectivamente, en la prueba individual femenina. En Tokio 2020, Valencia se quedó con el bronce en la prueba de equipos mixtos junto con Luis Álvarez.

La de ayer fue una tarde histórica para Alejandra, quien se convirtió en la cuarta mujer multimedallista mexicana, después de María del Rosario Espinoza (tres), Paola Espinosa (dos) y Alejandra Orozco (dos).

La presea del equipo es, además, la número 37 de bronce para México en la historia de Juegos Olímpicos y la 74 en general.

El podio conseguido por las arqueras refuerza también el crecimiento del deporte femenil, ya que su presea fue la número 20 conseguida por mujeres; 16 de ellas en las últimas seis ediciones.

En los cuartos de final, México venció a Alemania 5-1, lo que significó una revancha para el representativo nacional, pues las teutonas las eliminaron en los cuartos de final de Tokio 2020.

En la semifinal ante China, el selectivo nacional enfrentó un complicado duelo en el que cayó 3-5 para perder la oportunidad de ir por el oro.

Corea del Sur (Jeon Hun-young, Lim Si-hyeon y Nam Su-hyeon) se impuso a China con lo que ganó su décima medalla de oro consecutiva, igualando así la racha más larga de victorias en activo de un país en una prueba de los Juegos Olímpicos de verano.

Las asiáticas están imbatidas en la prueba femenina por equipos, que debutó en Seúl 1988, y ha ganado 18 de las 19 pruebas olímpicas femeninas disputadas hasta la fecha.

Nadie sabe lo que significan cinco ciclos olímpicos buscando medalla. Queríamos la de oro, pero el bronce también es maravilloso y sabíamos que podíamos ganarlo, dijo la sonorense Alejandra Valencia.