A punto de cumplirse 17 años de huelga en las minas de Cananea, Sombrerete y Taxco, el dueño de Grupo México, Germán Larrea, no sólo se ha opuesto a la solución del conflicto, sino que además resultó ser el más beneficiado económicamente al incrementar su fortuna, debido a la protección que las autoridades le siguen brindando y a costa de los trabajadores, aseguraron los dirigentes de las secciones 65, 201 y 17 del Sindicato Nacional Minero.

En entrevista, José Núñez Velázquez, secretario general de la sección 201 de Sombrerete, Zacatecas, y Antonio Navarrete, vocero de la sección 65 en Cananea, Sonora, señalaron que las secretarías de Gobernación y del Trabajo (STPS) han quedado rebasadas por las decisiones del poder económico y han sido incapaces de resolver el conflicto, pese a que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha declarado la legalidad de los movimientos.

Cuando hemos estado en las las mesas de negociación, en lugar de tutelar por los derechos de los trabajadores, ellos (las secretarías) defienden a capa y espada al empresario, apuntó Navarrete.

Las graves fallas en materia de seguridad e higiene, las violaciones a sus contratos colectivos de trabajo y a su sindicato son las principales razones que llevaron a los mineros a estallar las huelgas de manera simultánea el 30 de julio de 2007.

En la mina San Martín de Sombrerete, desde 2018 Grupo México mantiene a un grupo de esquiroles que trabajan de manera ilegal, al igual que en Cananea, donde tampoco ha parado la producción, tras el desalojo violento en 2010, lo que en ambos casos constituyó una afrenta al derecho de huelga, señalaron los líderes sindicales.

La única huelga donde las actividades están totalmente paralizadas es la de Taxco, Guerrero, donde Grupo México desistió de desalojar a los mineros gracias el apoyo y solidaridad de organizaciones sociales asentadas en la región, mencionó Roberto Hernández Mojica, de la sección 17.

Reina Castro Longoria, especialista de la Universidad de Sonora y senadora suplente por Morena, apuntó que Germán Larrea ha amasado su riqueza, estimada en 37 mil 800 millones dólares, sobre el saqueo, contaminación de pueblos, desastres ambientales y obreros caídos.

Tal es el caso de los trabajadores cananenses, quienes, dijo, han mantenido una lucha sin que aún se les resuelva lo medular: su regreso al trabajo y el pago de salarios caídos, ya que funcionarios del gobierno federal argumentan que los mineros sólo quieren dinero, a sabiendas del derecho que les asiste para resarcir los daños, consagrado en la ley, insistió.

El dirigente de la sección 201 acusó que en Sombrerete –caso que escaló a un panel laboral– a la fecha la STPS ha sido incapaz de ejecutar las resoluciones para reparar las violaciones que originaron el conflicto, pues permiten que continúen trabajando de manera ilegal cuando existe una huelga.

Los dirigentes de las secciones del Sindicato Nacional Minero en huelga reiteraron su petición a López Obrador de que intervenga para solucionar el conflicto antes de que concluya su administración.

Queremos decirle al Presidente que no nos abandone; creemos que en estos 60 días podemos resolver y acceder a la justicia que nos fue negado en administraciones pasadas, subrayó Navarrete.