Gaza. Las fuerzas israelíes continuaron ayer adentrándose en algunas localidades de Jan Yunis, en el sur de Gaza, tras lo cual dejaron un saldo de al menos 30 muertos y 146 heridos, informó el Ministerio de Salud gazatí.

El ejército llevó a cabo ataques en la ciudad de Gaza y en Beit Lahia, en el norte del territorio palestino, donde perecieron nueve personas, y en Al Bureij, en el centro, dejando siete heridos, la mayoría niños, según fuentes médicas.

Las tropas de Benjamin Netanyahu también prosiguieron sus operaciones en Jan Yunis y Rafah, en el sur. Aviones de guerra israelíes atacaron a civiles sentados cerca de sus casas, cinco de los cuales murieron, afirmó Ahmed Kahlut, director local de la defensa civil en Beit Lahia.

De acuerdo con testigos, los soldados volaron bloques de apartamentos en Tal Al Sultan, un barrio al oeste de Rafah, y en Bani Suhaila, al este de Jan Yunis, donde se registraron disparos desde vehículos militares. El ejército aseguró que atacó más de 60 instalaciones de la infraestructura de Hamas en 24 horas previas a su reporte, informó la oficina de prensa de Israel.

Miles de palestinos huyeron una vez más de los bombardeos, siguiendo las órdenes de evacuación del ejército en varios sectores de Gaza. Sin ningún lugar a dónde ir, las familias se refugiaron en la calle o, como en Jan Yunis, cerca de un cementerio.

El ejército informó que los cuerpos de los cinco rehenes recuperados la víspera fueron encontrados en un túnel excavado por Hamas.

Maya Goren, una maestra de guardería de 56 años, falleció durante el ataque en su kibutz, Nir Oz, según la radio del ejército israelí, una de las comunidades más afectadas en el mortífero ataque del 7 de octubre en el sur de Israel que desencadenó la devastadora guerra. Los otros cuatro rehenes eran Ravid Katz y Oren Goldin, que vivían en un kibutz cerca de Gaza, y los soldados Tomer Ahimas y Kiril Brodski, muertos en combate ese día, dijo el ejército. Sus cadáveres fueron recuperados en Jan Yunis.

Los cinco se encontraban entre los 120 rehenes que aún permanecen en Gaza, de los cuales un tercio han sido declarados fallecidos por Israel. El Foro de Familias de Rehenes, que lleva meses presionando al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, lo acusó de sabotaje a los esfuerzos destinados a liberar a sus allegados. Suman 39 mil 175 palestinos abatidos, y 90 mil 403 heridos o mutiladas, desde el comienzo de la guerra.