En un contexto en el que China comenzó a reducir su dependencia del maíz estadunidense al disminuir fuertemente sus importaciones desde ese país, México registra compras a EU sin precedente de este grano básico para cubrir la mayor demanda de la población y la menor producción, revelan datos oficiales.

Cifras del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) muestran que entre enero y mayo de 2024 China compró a EU un total de un millón 82 mil toneladas de maíz, una disminución de 77 por ciento en comparación con las 3 millones 284 mil toneladas reportadas en el mismo periodo del año pasado.

En contraste, durante los primeros cinco meses de 2023 México había comprado a la nación vecina 7 millones 895 mil toneladas de maíz, mientras en el mismo lapso de este año la cifra se ubicó en 10 millones 448 mil toneladas, una cifra sin precedente para un periodo similar, que además equivale a un incremento anual de 33 por ciento.

Prácticamente la totalidad del maíz que importa México para cubrir la demanda interna es de origen estadunidense, amarillo (usado por la industria y como forraje) y transgénico.

En el caso de China, entre 2021 y 2022 aumentó fuertemente sus compras de maíz a EU, con entre 17 y 18 millones de toneladas anuales, superando incluso a México, no obstante, para 2023 bajó sus importaciones a alrededor de un tercio al colocarlas en 5.6 millones de toneladas, marca que se prevé este año baje aún más.

En los últimos años China ha cubierto sus necesidades de maíz con mayor una producción local, alcanzando un récord de 695 millones de toneladas en 2023, pero sobre todo, con mayores compras a Brasil, su principal socio comercial en la región de América Latina.

Sequía provocó caída de 9%

Según información oficial, en 2023 Brasil superó a Estados Unidos como principal proveedor de maíz a China, con un total de 8 millones 790 mil toneladas de maíz.

El cambio de proveedor se da en un momento en el que las tensiones comerciales entre las que son consideradas las dos potencias económicas del mundo han escalado al grado de que ambas partes han interpuesto fuertes aranceles en sectores estratégicos.

De acuerdo con la USDA, las exportaciones totales de maíz de Estados Unidos cerraron los primeros cinco meses en un nivel de 27 millones 962 mil toneladas, un crecimiento anual de 24 por ciento frente a las 22 millones 500 mil toneladas reportadas en el mismo periodo del año pasado.

La razón por la cual las ventas de maíz de EU han continuado al alza, es precisamente a la mayor demanda de México y de Japón, que ahora es su segundo mayor cliente con compras por 6 millones 191 mil toneladas entre enero y mayo de 2024, un alza de 52 por ciento frente a las 4 millones de igual lapso de 2023.

En el caso de México, la Secretaría de Agricultura (Sader), señaló en un informe de expectativas agroalimentarias, que la prolongada sequía que se registró a inicios de año llevará a que la producción de maíz caiga en aproximadamente 9 por ciento.

Dicha caída se dará en el maíz blanco, cultivo en el que históricamente México ha sido autosuficiente, dado que se utiliza en la cadena masa-tortilla. En lo que se refiere a maíz amarillo, este es prácticamente inexistente en México, por lo que cada año el país importanta desde Estados Unidos entre 17 y 18 millones de toneladas, cantidad que se espera este año sea superior.