A menos de un mes de que venza la prórroga del emplazamiento a huelga no ha habido avances sustanciales en las negociaciones con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), señaló Enrique Escalante Ibarra, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Indigenistas (SNTI).

En entrevista con La Jornada, expuso que sólo se plantea aumentar 4 por ciento directo al salario, cuando en el pliego petitorio el sindicato solicita un incremento de 10 por ciento directo al sueldo compactado y compensación garantizada, así como la modificación de diversas cláusulas económicas de su contrato colectivo de trabajo (CCT).

Sobre las prestaciones, el INPI prevé ofrecer algunas mejoras en ayuda a despensa, transporte, previsión social múltiple, capacitación y desarrollo y ayuda por servicio.

Originalmente el estallamiento de la huelga estaba previsto para el 30 de junio pasado, pero se aceptó una prórroga, que vence el 14 de agosto a las 12:01 horas.

Escalante Ibarra dijo que los funcionarios del INPI insisten en que carecen de presupuesto para atender la totalidad de las mejoras salariales que demandan, por lo que la situación está complicada, más aún porque están poniendo de excusa que se acaba el sexenio.

El sindicalista explicó que las condiciones salariales de mil 313 trabajadores sindicalizados del INPI en el país son precarias, pues la mayoría de los empleados perciben al mes 13 mil pesos, pero existen niveles que reciben 9 mil, y los mejores sueldos son de 21 mil, pero son sólo dos plazas de la Ciudad de México.

El SNTI presentó propuestas de reformas a algunas cláusulas relevantes que atienden a razonamientos de justicia y equidad, y se pretende actualizar y mejorar algunas de las prestaciones y estímulos a contextos reales alcanzables, acordes al incremento del índice inflacionario promedio acumulado, desde la última revisión al CCT.

La demanda obedece a la pérdida del valor adquisitivo del dinero por los altos incrementos a la canasta básica que impactan directamente el bolsillo de los compañeros trabajadores, lesionando la economía familiar.

Entre las peticiones está la compactación de los niveles más bajos hacia arriba, a fin de que tengan una ligera alza en percepciones, y sostuvo que esto no significaría una inversión mayor porque las diferencias salariales entre estos niveles son pequeñas.

También en el emplazamiento se plantea que se realice una revisión profunda al catálogo de puestos, pues las actividades descritas no corresponden con la realidad de las funciones que desempeñan nuestros compañeros. Se debe destacar la existencia de puestos que ya son inoperantes en la actualidad.