Pekín. China informó ayer que realiza maniobras militares con Rusia denominadas Ejercicio Conjunto Marítimo-2024 en las aguas y el espacio aéreo cercanos a la ciudad de Zhanjiang, provincia de Guangdong, en el sur del país, ante el posible riesgo de que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) extienda su influencia en Asia ante la supuesta alianza entre las dos potencias aliadas en la guerra en Ucrania.

Las operaciones se llevan a cabo de acuerdo con el plan de compromiso militar anual entre ambos países y el acuerdo bilateral, y está previsto que duren hasta mediados de julio, informó el coronel superior Zhang Xiaogang, vocero del Ministerio de Defensa Nacional de China, en conferencia de prensa.

Se trata de demostrar la determinación y las capacidades de los ejércitos para abordar conjuntamente las amenazas a la seguridad marítima y preservar la paz y la estabilidad mundial y regional, aseguró el funcionario, citado por la agencia Xinhua.

Apuntó que las operaciones profundizarán aún más la asociación estratégica integral de coordinación entre China y Rusia para la nueva era.

Los buques que participan arribaron a Zhanjiang, y están acompañados de fragatas de misiles guiados y buques de suministro, informó la cadena estatal CGTN. Esta ciudad portuaria sirve de sede a las fuerzas navales chinas asignadas al Comando del Teatro de Operaciones del Sur, y el mar Meridional es la principal zona de responsabilidad de la denominada Flota del Mar del Sur de China.

Los barcos chinos que participaron en la patrulla conjunta, el destructor 052D Yinchuan, la fragata 054A Hengshui y el buque de reabastecimiento 903 Weishanhu, entre otros, están asignados a la Flota del Mar del Sur. La corbeta rusa Sovershennyy partió de su puerto base de Vladivostok en el Lejano Oriente y se unió a un grupo de tareas navales chino en el mar de China Oriental, informó la flota rusa del Pacífico el pasado día 4.

Durante la cumbre en Washington que conmemoró los 75 años de la Alianza Atlántica, los miembros del bloque militar expresaron su preocupación por la ayuda de China a Rusia en la guerra en Ucrania por proporcionar suministros, como equipo civil y militar.

Estos puntos se plantearon durante una reunión el jueves con sus socios de Australia, Japón, Corea del Sur y Nueva Zelanda. El gigante asiático consideró que la invitación de estos países constituye un pretexto de la alianza para extender su influencia en Asia, y les advirtió de provocar una confrontación.

Al margen de la cumbre, la Casa Blanca anunció que Estados Unidos desplegará puntualmente, a partir de 2026, armamento con más alcance del que tiene posicionado actualmente en Europa. Rusia consideró este anuncio y el refuerzo del apoyo de la OTAN a Ucrania como la prueba de una implicación directa en la guerra y de la vuelta “a la guerra fría”.