El Museo Nacional de la Estampa (Munae) debe ser también para los creadores jóvenes, no sólo para los consagrados, señaló su titular, Emilio Payán, con motivo de la próxima apertura de las exposiciones de los grabadores Sebastián Fund y Carlos Soto, ambos, artistas menores de 40 años, pero con sólidas trayectorias en esa disciplina.

El Munae ha realizado muestras que homenajearon la obra de Francisco Toledo y de Vicente Rojo. Ahora corresponde a los jóvenes contar con este espacio, porque no los tienen, aseguró Payán a La Jornada. Tanto Fund como Soto han sido reconocidos por el Sistema Nacional de Creadores.

Para el director del recinto, ambos expositores se vinculan con el tema general de su obra que está en busca de la verdad. Fund, por medio de la máscara, mientras Soto, con una propuesta política y poética de denuncia. Desarrolla el tema de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, con la finalidad de que no se nos olvide este acontecimiento tan presente en la vida social de este país. El vínculo, a final de cuentas, es el espacio, la gráfica, y que son jóvenes creadores.

Dos obras de Soto que forman parte de la exposición también integran el acervo el Munae: Retratos contra el olvido (2021), políptico linoleografía, y 27.S.2014 (2021), collage fragmentado de linoleografías.

La obra que exhibe Fund (1985) –nacido en Argentina, naturalizado mexicano y radicado en Xalapa– en La verdad de las máscaras, y Fragmentaciones al límite, de Soto (Ciudad de México, 1986), fue producida durante la contingencia sanitaria causada por el covid. Se exponen tres videos y 44 obras de Carlos Soto, y 39 de Sebastián Fund.

Caretas, luces y sombras

El concepto detrás de la exposición de Fund es la máscara. Una frase de Oscar Wilde, reproducida en la pared de la sala, lo resume: El hombre miente por naturaleza, dale una máscara y te dirá la verdad. La idea, pues, gira en torno a los disfraces personales, los de la sociedad, sin olvidar que la pandemia generó el cubrebocas, que para el artista representó una máscara de distanciamiento social, de protección, de cuidado del otro.

A partir de la pandemia, Fund empezó a profundizar en el tema y a cuestionar, en principio, cuáles son mis máscaras, que también tiene que ver con una cuestión sicológica entre luces y sombras.

En esta ocasión, el artista ha podido profundizar, además, en el grabado en color y la exploración de este elemento en la gráfica, algo que lo ha llevado a indagar en muchos retos, ya que considera complejo el color en la gráfica.

▲ En la imagen superior, Carlos Soto, quien en su obra aborda sucesos históricos que han marcado a México en las tres décadas recientes, como el sismo de 2017, la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, los movimientos feministas y la pandemia. Por su parte, Sebastián Fund aborda la idea de los disfraces personales y sociales.Foto Roberto García Ortiz

Recorrer su muestra es sumergirse en un mundo de técnicas que van desde la litografía a nueve tintas y a piedra perdida; de la colografía, la xilografía, la serigrafía y el chine-collé hasta la heliografía con aguatinta y aguafuerte. También se exhiben algunas de las placas de los grabados de gran formato.

El español Juan Bautista Peiró, curador de La verdad de las máscaras, anota que Fund, desde sus inicios, se planteó desarrollar su poética entre técnicas distintas.

A decir de Fund, “en cada técnica hay una libertad expresiva distinta. Por ejemplo, la litografía, para mí, es un trabajo espontáneo, una cuestión de valores de líneas; en el caso, por ejemplo, de Karl, retrato del sicoanalista Carl Jung, una exploración del color”.

Crear contra el olvido

Soto, por su parte, al hablar de su proyecto de cuatro años, dijo que cada tema abordado en su obra también hace eco de muchos asuntos que “tenemos los mexicanos. Cada quien tiene su experiencia a partir del detonante de la fecha de la pandemia, así como historias que contar.

Son piezas que tienen mucho que ver con no olvidar las fechas ni los momentos.

La selección de piezas es una exploración en gráfica y collage originada en 2020 por el proyecto Crear, Destruir, Preservar, realizado para el programa Jóvenes Creadores.

Curada por Lilia Prado, la muestra aborda sucesos históricos que han marcado a México en las pasadas tres décadas, como el sismo de 2017, la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014, los movimientos feministas de 2020 y la pandemia.

Prado agregó que a Soto le importa mucho la parte colaborativa; entonces, le gusta incluir en sus proyectos a colectivos, en particular feministas.

Tanto Fund como Soto expresaron su beneplácito por la oportunidad de exhibir en el Munae. Para mí, es mucho más congruente exhibir con mi compañero (Soto) que hacerlo con alguien de 50 años, anotó Fund.

Las exposiciones La verdad de las máscaras y Fragmentaciones al límite se inauguran mañana a las 12 horas en el Museo Nacional de la Estampa (avenida Hidalgo 39, colonia Centro).