El aumento en los precios de frutas y verduras es constante desde hace varias semanas en los mercados públicos de Jamaica y Medellín, particularmente la naranja, el plátano Tabasco, el chayote y el aguacate; los últimos dos se encuentran entre 70 y 130 pesos el kilo, respectivamente, lo que ha llevado a las amas de casa a mantener la estrategia de no comprar kilos completos, sólo de vez en cuando.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la inflación repuntó 4.98 por ciento en junio, su nivel más alto en 12 meses, impulsada por el alza en esos precios.

En un recorrido por Jamaica, se constató que también subió el jitomate, al pasar de 13 y 15 pesos a 35 y hasta 50; en tanto, la lechuga se mantiene cara y se vende de 35 a 40 pesos la pieza.

El cilantro sigue entre 600 y 500 pesos el manojo de cuatro kilos, por lo que sólo se venden unas tres ramitas en cinco pesos.

Hugo, quien se dedica al comercio de frutas y hortalizas en ese lugar, señaló que ya no ponen cilantro a los tacos de carnitas, y ahora pasa lo mismo con el chayote, que ya no se incluye en el consomé de pollo, como el que comía la tarde de ayer.

La calabaza también está carísima, en 26 pesos, cuando costaba 10 el kilo; en tanto, el chayote ya bajó, está a 70 pesos, pero llegó a costar 110 pesos el kilo. Ahora ya está como los tacos, al caldo ya no saben si echarle pollo o chayote.

Agregó que la semana pasada el ejote costaba 100 pesos el kilo, pero ayer estaba en 40, y comentó que el aumento en los precios no tiene una explicación porque muchas veces dicen que por la sequía, y ahora que llueve, porque se inunda y no pueden trabajar porque las frutas y hortalizas se echan a perder.

Asimismo, el manojo de rábanos pasó de 35 pesos a 140 pesos.

Andrea, quien atiende uno de los locales de esa mercancía, coincidió en que todas las lechugas se encarecieron, el cilantro, el aguacate y jitomate. La jícama está cara, en 30 pesos; digamos que lo que se mantiene es el limón, entre 20 y 22.

Adriana, quien viaja desde San Martín Las Rajas Huitzizilapan, en el municipio mexiquense de Lerma, comentó que es más barato comprar en Jamaica, pero nada está barato, todo está caro, el clima es el pretexto, que por el calor, ahora por el agua; ya no se sabe.

Mencionó que ante la carestía decidió cocinar lentejas con salchichas, pero en su familia el platillo pasó de ser la sopa a guisado; el aguacate ya no lo compro, rara vez.

Elizabeth Aguilar, habitante de la colonia Lorenzo Boturini, en Venustiano Carranza, aseguró que resulta más caro comprar verduras para cocinar cuando antes era lo más económico, al detallar que el bistec de puerco cuesta 130 pesos, el retazo de pollo entre 35 y 40 o la pechuga en 97 el kilogramo.

En el mercado Medellín, los comerciantes dijeron que el aguacate subió hasta 130 pesos, entre algunas de las razones citaron que es por la mafia, mientras la naranja está en 50 pesos y el plátano llegó a 40.