Política
Ver día anteriorLunes 8 de julio de 2024Ediciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
CDMX convierte a Tula, Hidalgo, en un infierno ambiental
Foto
▲ Las descargas de aguas residuales de la capital hacia el estado aledaño equivalen a que un vecino abra un boquete en tu pared y aviente ahí sus desechos, dice un activista. En la imagen, protesta frente a la Conagua, en la ciudad de México, el mes pasado.Foto Alfredo Domínguez
 
Periódico La Jornada
Lunes 8 de julio de 2024, p. 13

La zona metropolitana del valle de México expulsa sus aguas residuales sin tratamiento a Hidalgo, lo cual es como si tuvieras un vecino rico que hiciera un hoyo en la pared y te avienta toda su basura, señaló Angélica Arellano, de la Red de Conciencia Ambiental Queremos Vivir, quien advirtió que ante la temporada de lluvias, en Tula continúa el riesgo de inundaciones.

Organizaciones consideran este sitio uno de los infiernos ambientales, junto con la cuenca del río Santiago, en Jalisco, y el río Atoyac, en Puebla, que también están contaminados por las descargas de aguas residuales, advirtieron durante el conversatorio virtual Territorios en riesgo socioambiental por contaminación en México, convocado por Bajo Tierra-Museo del Agua de Querétaro.

Arellano recordó que en 2021, en plena pandemia, hubo inundaciones que afectaron un hospital del IMSS. Ya se vivió la tragedia y el miedo es que se repita cada que llueve en la Ciudad de México; mandan un caudal excesivo de lluvias con el Túnel Emisor Oriente (TEO). Aquí se debe cambiar el paradigma de manejo del agua; se deberían buscar soluciones aguas arriba del río Tula, de donde vienen los emisores, y no usar el río para contener el agua que quieren expulsar. Se deben reducir los trasvases de aguas residuales.

El mayor movimiento de agua de una cuenca a otra se efectúa en el valle de México. A la ciudad de México llega agua de otra cuenca, del Sistema Cutzamala, en el estado de México, y después la expulsa como desechos al río Tula, que es un cauce natural y no tiene capacidad de captar tanta agua, mencionó.

Precisó que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tenía el proyecto de revestir con cemento el río Tula y talar árboles a lo largo de 19 kilómetros, a lo cual se opusieron, pero ya avanzó en cuatro kilómetros en la zona urbana. Presuntamente se haría con técnicas que no afectaran al río, que es un ecosistema que influye en el equilibrio ecológico. Son infiernos ambientales, donde la contaminación se genera, no se cumplen nor-mas y se afecta la salud.

La privatización de los servicios de agua potable y saneamiento, a pesar de que son derechos humanos, en la zona metropolitana de Puebla quedó a cargo de la empresa Agua de Puebla, y ha hecho una mala gestión, se vive un infierno ambiental. Desde hace 10 años el saneamiento de aguas residuales concesionado no se realiza, no existe en esta zona del país, por lo que las aguas residuales se vierten principalmente a los ríos Atoyac y San Francisco, explicó Manuel Sandoval, de la organización Defensa Colectiva del Agua de Puebla.

Agregó que el río Atoyac es uno de los más contaminados del país, atraviesa los estados de Puebla y Tlaxcala, y la Comisión Nacional de Derechos Humanos ya recomendó el saneamiento del cuerpo de agua que desemboca en Oaxaca, lo cual no se ha hecho, y las descargas de aguas residuales que no son tratadas se vuelven un problema de salud pública para las tres entidades.

El río Santiago, en Jalisco, es el ejemplo de lo que no debería pasar. En la zona de El Salto y Juanacatlán hay corredores industriales, alrededor de 750 empresas están asentadas desde el Lago de Chapala hasta Zapopan, y son de todo tipo, desde industria de alimentos, bebidas, automotrices y electrónicas hasta petroquímicas, sostuvo Graciela González, del colectivo Un Salto de Vida. Recordó que un estudio del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua encontró mil 90 tipos de contaminantes en el agua del río Santiago y que 94 por ciento de las empresas no cumplían la norma.