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Se busca que sean muy calificados: Álvarez-Buylla

Conahcyt destinó 3 mil 847 mdp a proyectos de equipamiento
 
Periódico La Jornada
Martes 25 de junio de 2024, p. 13

La ciencia básica y de frontera recibió en la actual administración federal más de 3 mil 847 millones de pesos para el desarrollo de proyectos y de infraestructura científica y tecnológica, afirmó la doctora Elena Álvarez-Buylla Roces, directora general del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), que a partir de la próxima administración pasará a ser la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación.

Al recordar que en el periodo 2017-2018 se dejó sin un peso a la ciencia básica, la académica señala que una de sus primeras acciones al frente del organismo fue rescatar los proyectos altamente calificados, entusiasmar a las verdaderas comunidades de humanidades, ciencias, tecnologías e innovación para que se arriesgarán a hacer contribuciones novedosas que generaran verdaderas innovaciones.

De acuerdo con datos del propio Conahcyt, los proyectos del campo de la biología y química fueron los de mayor financiamiento, con 994 millones de pesos; le sigue medicina y ciencias de la salud, con 759 millones; el área físico-matemática y ciencias de la Tierra, con 726 millones; ingeniería y desarrollo tecnológico, 570 millones; agricultura, ciencia forestal y agropecuaria, con 437 millones; ciencias sociales, 164 millones; humanidades, 143 millones; interdisciplinarias, 44 millones, y ciencias de la conducta y educación, 11 millones de pesos.

En un balance de su gestión en el consejo, Álvarez-Buylla reconoció que aún hay retos por atender, entre ellos aligerar la carga burocrática que impone tanto la Secretaría de Hacienda y Crédito Público como la propia administración de las instituciones de educación superior para evitar retrasos en el uso de los recursos destinado a la ciencia básica.

Antes de concluir su mandato, señala que se presentarán importantes avances en una agenda de prioridades para el país, entre ellas contar con un proyecto nacional estratégico de toda la cadena de valor del litio, mineral conocido como oro blanco por sus diversas aplicaciones para el almacenamiento de energía generada a partir de fuentes renovables, en particular baterías.

Ya tenemos sal de litio, pese a que nos decían que tardaríamos 10 o 20 años, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador, con esa claridad que tiene, nos dijo que aunque tardáramos 50 años, por que si no para qué haberlo nacionalizado, para que vengan la industria de Estados Unidos o de China, y en relativamente poco tiempo, menos de un año, tenemos un avance de 95 por ciento en el proyecto para su explotación, extracción y beneficio.

Explotación del litio y soberanía nacional

Admitió que separar el litio de su matriz arcillosa en que se encuentra en nuestro país no es nada fácil, por eso lanzamos una convocatoria con expertos nacionales e internacionales. Vinieron de Bolivia y de Chile, pero fue el Centro de Investigación de Materiales Avanzados, uno de los 26 Centros Públicos de Investigación (CPI) adscritos al consejo en el que encontramos uno de los grupos científicos más capaces.

Al contar con un nuevo sistema nacional de los CPI, logramos sumar también capacidades del Centro de Tecnología Avanzada y del Centro de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México, campus Juriquilla, y ya tenemos lo que se solicita al nivel más alto de pureza.

Explicó que tras los hallazgos del equipo científico para desarrollar la tecnología capaz de extraer el litio de su matriz arcillosa en diferentes configuraciones, este nuevo conocimiento está en proceso de protección por parte del Estado mexicano, pues se trata de tecnologías cien por ciento públicas.

Estamos depurando los últimos niveles de pureza (de las sales de litio) y contamos con un plan maestro de planta piloto. Además, en otro CPI se está fabricando uno de los hornos que se necesitan para la producción de las sales, porque tenemos que alcanzar la manufactura nacional para tener una cabal soberanía.

En colaboración con la Secretaría de Economía y el Servicio Geológico Mexicano, dijo, hay avances acerca de dónde están los yacimientos más importantes del país, pero no sólo eso, como el presidente López Obrador nos mandató desarrollar toda la cadena de valor, también avanzamos en el desarrollo de sensores inteligentes para la electromovilidad y microcircuitos.

Innova Bienestar

A todo eso se suma que en julio próximo el Conahcyt presentará en la capital del país el primer autobús cien por ciento eléctrico hecho en México con diseños propios, como resultado de una alianza de diversos CPI y empresas mexicanas como Dina y Megaflux. Estos proyectos, señala, han dado como resultado que el consejo pase de cero licencias de propiedad intelectual a poco más de 60 patentes que, afirma, pueden crecer mucho más.

Otro de los logros es la creación de una nueva paraestatal, Innova Bienestar de México, con el que se impulsa el desarrollo de tecnología e innovaciones a partir de investigaciones propias que hagan realidad una innovación, pero con soberanía y para el bienestar de la población.

De ahí nace Serimédica de México en alianza con una empresa nacional de base científica y tecnológica que nunca antes había recibido recursos públicos, y con quien desarrollamos el Ehécatl 4T, uno de los dos ventiladores mecánicos con que contamos.

Actualmente, señaló Álvarez- Buylla, se cuenta con una planta con capacidad de producción de 24 mil equipos e insumos médicos, entre ellos torres de alto flujo y concentradores de oxígeno a los que se agregarán en 2025 máquinas de anestesia, monitores de signos vitales, camas hospitalarias, sillas de ruedas con tecnología de seguimiento ocular, así como un sensor para detección de cáncer cervicouterino, así como una versión 2.0 del ventilador Ehécatl 4T, que contará con innovaciones disruptivas, pues será el único ventilador mecánico que tendrá un control automático para regular la presión y el volumen de oxígeno, a fin de evitar dañar el pulmón de los pacientes.