Con un desempeño notable, cimentado en un juego coral y en la jerarquía de sus futbolistas, Portugal goleó 3-0 a Turquía ayer en Dortmund y selló su boleto a los octavos de final de la Eurocopa.

Gracias a este triunfo, el equipo luso aseguró el primer puesto del Grupo F con seis puntos, tres más que su rival (segundo).

Bernardo Silva (22), Samet Akaydin (28, en propia puerta) y Bruno Fernandes (56) firmaron una victoria solvente para la selección dirigida por Roberto Martínez.

Dortmund repetía como sede de la selección turca y se vivió un sábado de apoteosis. El equipo otomano probaba su euforia ante una potencia continental.

Con su cotizada nómina de futbolistas, Portugal se apoderó enseguida del balón para tratar de encontrar una rendija ante un equipo inferior técnicamente, pero poseído por el fervor de los suyos.

La Seleçao no tembló, aunque prácticamente se movían los cimientos del BVB Stadion, y la lógica se impuso cuando Nuno Mendes dobló a Rafael Leao y el balón se paseó hasta llegar a Silva, letal al primer toque ante el portero Altay Bayindir.

Turquía arruinó su fiesta con el fallo del torneo, luego de que Akaydin cedió la bola a Bayindir, pero ésta entró en su propio marco. Un desastre que acabó en el 2-0.

El italiano Vincenzo Montella, seleccionador turco, había dejado en el banquillo a sus dos perlas de 19 años, Kenan Yildiz y Arda Guler, cuyo nombre retumbaba en la catedral del Borussia Dortmund.

Entonces apareció Ronaldo, dos décadas mayor que el nuevo fenómeno del Real Madrid, para quedarse solo ante el portero y ceder a Bruno Fernandes, quien no perdonó.

El cinco veces Balón de Oro estuvo a un disparo de batir un par de marcas –goleador de más edad y en seis ediciones del torneo–, pero prefirió compartir.

Con su familia en el palco, CR7 estaba de buen humor. Un niño saltó al campo y eludió agentes de seguridad para tomarse un selfie. La leyenda aceptó y posó con su mejor sonrisa. Le emularon otros tres, de más edad, pero ya no fueron tan bien acogidos, y los aplausos al primero se convirtieron en abucheos.

Para entonces ya había entrado Guler (70), recibido como el mesías, pero no tuvo tiempo para mostrarle a Ronaldo que aspira a tomar su testigo algún día.

Por otro lado, Bélgica corrigió su camino en la Eurocopa, tras caer 1-0 ante Eslovaquia en su debut, y venció 2-0 a Rumania en Colonia, con lo que aún aspira a clasificar a la siguiente ronda.

Yuri Tielemans tardó sólo 73 segundos en abrir el marcador contra los rumanos, pero los Diablos Rojos tuvieron que esperar hasta la recta final para que Kevin de Bruyne (80) sentenciara el encuentro.

Pese al triunfo, el conjunto belga dejó dudas sobre la eficacia de su ofensiva, tras las numerosas oportunidades desaprovechas por Romelu Lukaku y Dodi Lukebakio.

El resultado deja a los cuatro equipos del Grupo E (Rumania, Bélgica, Eslovaquia y Ucrania) con tres puntos, por lo que la tercera jornada será decisiva para el pase a octavos.

En el otro partido del sector F, Georgia y República Checa igualaron 1-1 en Hamburgo. George Mikautadze adelantó a los georgianos de penal (45+4), siendo su segundo tanto en el torneo.

La derrota dejaba a los checos al borde de la eliminación, pero evitaron ese escenario gracias a un gol de Patrick Shick, al 59. De esta manera, ambos equipos sumaron un punto y conservan sus opciones de clasificar a octavos, al menos como mejores terceros de su sector.

Con información de Afp