Viernes 17 de mayo de 2024, p. 12
A un año de que el gobierno de Estados Unidos determinó el uso obligatorio de la aplicación CBP One para solicitar asilo en su país, se confirma que es una medida violatoria a los derechos humanos y al derecho de los refugiados, al limitar de manera drástica
el acceso a las personas necesitadas de protección, aseguró Amnistía Internacional (AI).
Indicó que su uso sigue siendo un reto para los solicitantes de asilo, porque además de necesitar un teléfono celular inteligente, acceso a Internet y estar en el centro o norte de México, continúa presentando fallas tecnológicas y las citas disponibles son pocas –mil 450 al día–, lo que ha alargado el tiempo que deben esperar a más de cuatro meses.
Además, advirtió que la aplicación no asigna las citas por orden de registro, sino que funciona esencialmente como una lotería
, por lo que una persona puede obtener la cita al día siguiente de tramitarla y otras tardar más, e incluso es posible que algunas nunca la consigan
.
En un informe, AI señaló que según datos oficiales de Estados Unidos, desde mayo de 2023, cuando se levantó el Título 42 –medida implementada ante la pandemia de covid-19 para permitir la expulsión inmediata de migrantes–, hasta enero de 2024, con el Título 8, se han dado 421 mil 570 citas a través de la aplicación CBP One, principalmente a personas originarias de Venezuela, México y Haití.
Asimismo, La Jornada dio a conocer el domingo pasado que desde el 11 mayo de 2023 hasta abril pasado, el gobierno estadunidense ha deportado a más de 690 mil migrantes, el mayor número de expulsiones en más de una década, según información del Departamento de Seguridad Nacional.
AI explicó que CBP One asigna aleatoriamente 70 por ciento de las citas a solicitantes de asilo que la tramitaron el día anterior, y el 30 por ciento restante a quienes la piden con las cuentas más antiguas y que llevan más tiempo esperando, lo que genera estrés, frustración y preocupación innecesarios.
Apuntó que aunque el funcionamiento de la aplicación ha mejorado, aún presenta dificultades debido a la complicación del registro, a los errores y fallos tecnológicos.
Agregó que el uso que se hace del reconocimiento facial, el rastreo por GPS y el almacenamiento de datos de los solicitantes de asilo antes de su entrada en Estados Unidos plantea graves problemas de privacidad y no discriminación
.
Respecto a México, AI indicó que en el país los solicitantes de asilo a menudo
son extorsionados, secuestrados y sufren discriminación y violencia sexual y de género por agentes estatales y de otra índole.