Fue un agitador cultural, místico y activista
, apuntó Inti Guerrero, codirector de arte del encuentro
Martes 14 de mayo de 2024, p. 3
El pintor oaxaqueño Francisco Toledo sigue presente en la actualidad del arte, pues varias de sus obras formarán parte de la 24 edición de la Bienal de Sidney, en Australia.
Con el nombre de Ten Thousand Suns (Diez mil soles), esta fiesta del arte logró reunir las piezas de 116 creadores internacionales, incluido el fundador del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, y estará en exhibición en recintos culturales de la capital australiana hasta el 10 de junio, informó el encuentro en un comunicado.
El codirector de arte de la Bienal, Inti Guerrero, afirmó que se trata de “una apuesta por poner en diálogo la multiplicidad del mundo. Así como hay diferentes formas de referirse al sol en miles de lenguajes, donde cada cultura tiene mitologías específicas relacionadas con el astro rey, también hay diferentes formas de existir en el mundo.
En Sidney celebramos esa multiplicidad desde varias perspectivas, no como un guiño en torno a la diversidad cultural, sino para reunir la forma en que los artistas revelan las fricciones y complejidades de los contextos que habitan, y los lugares imaginados.
Agregó: con la obra de Toledo logramos formar un cuerpo de trabajo para mostrar en Australia la complejidad de su universo y sus múltiples referencias, las variadas formas en que este gran artista creaba imágenes de mundos que contestaban a éste
.
Mencionó que el maestro oaxaqueño va más allá de ser un creador de estudio. “Realmente movilizó las redes humanas, comunitarias; se trata de un icono que existe en el imaginario colectivo de México y de América Latina. Toledo fue más allá de la idea de artista: fue un agitador cultural, místico y activista.
“Exhibidas como constelaciones, la selección de obras se pensó para que cada pieza sea un portal hacia un espacio-temporal diferente, ya sean sus intrigantes autorretratos, sus divertidos collages sobre construcciones precoloniales, así como su iconografía mitológica de los animales-ancestros de la cosmogonía zapoteca.”
Una feria optimista y crítica
La exhibición ocupa seis espacios entre museos e instituciones; incluso, una antigua planta de electricidad que se reabrió como espacio cultural.
“Ante todo, queríamos hacer una bienal optimista, crítica, pero creyendo en el poder transformador del arte. Esto es necesario sobre todo en un momento en el que el pensamiento apocalíptico es hegemónico, pues constantemente se piensa que vamos hacia el fin del mundo; esto nos despoja de la posibilidad de cambiar cosas que aún es posible modificar.
El sabio Alton Krenak dijo que tenemos la capacidad de cambiar el mundo que estamos habitando. También hay que recordar que muchas culturas indígenas, pueblos originarios, vivieron realmente el fin de sus mundos. Pero también han sobrevivido muchas cosas a través de la resistencia y la resiliencia de estos contextos, como el zapoteca y sus legados culturales y lingüísticos, que fueron difundidos por Francisco Toledo
, expresó Guerrero.
Sobre la sede, el codirector del festival aseguró que Australia es un lugar idóneo para el lenguaje visual que Toledo creó, porque todo lo que tiene que ver con territorio y mitologías, donde aparecen animales o figuras zoomorfas, forman parte de muchas de las naciones aborígenes de aquí. Nuestro primer deseo era ver cómo conectar al público con todas estas fábulas, mitologías y mundos fantásticos que aparecen en gran parte de las obras de Toledo
.
En la exhibición también hay cerámicas que hizo sobre la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa. El maestro Toledo capturó ese momento, lo que muestra esa diversidad de práctica que tenía como artista y activista social
, concluyó Inti Guerrero.