Viernes 10 de mayo de 2024, p. 25
Morelia, Mich., Tres bombas de agua, que se utilizaban para el riego de huertas de aguacate y frutillas rojas, fueron decomisadas por elementos de la Guardia Civil de Michoacán (antes policía estatal), en la zona perimetral del lago de Zirahuén, municipio de Salvador Escalante, informó la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán.
El organismo de seguridad indicó en un comunicado que los hallazgos se llevaron a cabo por medio de denuncias ciudadanas y que las máquinas extraían más de 200 mil litros de líquido en ocho horas. En el primer aseguramiento, los uniformados fueron alertados sobre un ducto que se encontraba cerca de la localidad de Agua Verde, donde se detectó una bomba de la marca Excell, 10 metros de manguera y 10 más de cable; en total se extraían 55 mil litros en un periodo de ocho horas.
Explicó que en la localidad de Santiago Tzipijo, habría una máquina Bonhoeffer con capacidad de extraer 150 mil litros de agua durante las mismas ocho horas, así como nueve metros de manguera. En el sitio se encontraban dos personas quienes emprendieron la huida al notar la presencia de la autoridad.
Plantíos de aguacate y limón
En la misma la comunidad pero en otra ubicación, los agentes desinstalaron una toma ilegal del líquido, por medio de la cual aparentemente se abastecía un plantío de limón.
Autoridades comunales de Zirahuén han insistido en la pasada década, que en la zona montañosa que rodea el embalse se han sembrado cerca de 10 mil hectáreas de aguacate, y que el agua para el riego se ha extraído del lago. Responsabilizan a pequeños propietarios que se han ido adueñando de esta zona, e incluso de manera ilegal se han apropiado de terrenos que no les pertenecen.
En zona perimetral del cuerpo de agua hay una franja de terreno de propiedad federal que también ha sido invadida para la construcción de hoteles y restaurantes, incluso desde el tiempo en que vivía el líder comunal Efrén Capiz, grupos empresariales pretendían construir un club de golf.
Zirahuén es un lago sustentable, que cuenta con manantiales y aguas transparentes, pero con los escurrimientos de las huertas de aguacate, se han depositado químicos, que hace apenas poco más de un lustro tiñó las aguas superficiales de amarillo. Los daños al embalse aún son menores, pero de continuar el saqueo del recurso y el desorden en poco años correrán la misma suerte que los lagos de Cuitzeo y Pátzcuaro, advirtió el dirigente del Consejo Supremo Indígena de Michoacán, Pavel, Guzmán.