Chivas convirtió el estadio Hidalgo en su territorio para sacar un importante triunfo en sus aspiraciones por el pase a la liguilla. Fue un duelo redondo para el Guadalajara, que aprovechó un yerro del Pachuca y se impuso 1-0 en la jornada 15 para acechar la zona de clasificación directa con 25 unidades, mismas que los Tuzos.

Ya comienza a ser clásico ver a los seguidores tapatíos invadir los recintos como visitantes y esta vez fue la casa de los Tuzos la que se tiñó de rojiblanco. A donde vaya el Guadalajara, su afición busca hacerse presente y en esta ocasión celebraron al grito de Chivas, Chivas.

Además de respaldar al equipo, los seguidores esperaban ver a Javier Chicharito Hernández, uno de los últimos ídolos del futbol mexicano, pero el ariete fue descartado un día antes por una molestia. Por segundo partido consecutivo, no estaría con los tapatíos.

Con la aspiración de alcanzar un boleto directo a la liguilla, Fernando Gago, técnico de los rojiblancos, sorprendió al dejar en la banca a Cade Cowell y darle la titularidad a Pavel Pérez, quien estuvo fuera del campo en los últimos cinco juegos.

El cambio tuvo una respuesta favorable, el Guadalajara desplegó un juego ofensivo ante un Pachuca que pese a ser arriesgado no encontró la combinación para superar al rival.

En el gradería había un ganador claro, los tapatíos rugían de mane-ra constante cánticos en favor de los rojiblancos, frases de aliento para los visitantes que también generaron presión sobre los Tuzos en su propia casa. Así, en medio de un duelo ríspido e incluso con choques entre los jugadores, llegó el único y decisivo gol al minuto 42 tras un error de los locales.

Alan Mozo rompió a la defensa al mandar un centro desde el costado izquierdo, los Tuzos cayeron en desconcentración cuando Jorge Berlanga buscó el balón y chocó con su compañero, el arquero Carlos Moreno. El yerro más grave fue de Gustavo Cabral, quien inten-tó desviar el esférico y terminó por enviarlo a puerta propia.

El escenario empeoraría para los hidalguenses, pues además de la desventaja en el marcador perdieron a su entrenador, Guillermo Almada, quien se fue expulsado al minuto 56 por reclamos al árbitro. De nueva cuenta, el timonel caía en la polémica tal como lo ha hecho en partidos anteriores.

Los rojiblancos dieron un par de sustos en el complemento, con un Cade Cowell que al ingresar de cambio sólo pudo ser detenido por el guardameta Moreno. Así, los Tuzos cayeron en casa, que se había tornado en su contra.