Muestra en París aborda la dupla moda y deporte
arís será sede de los Juegos Olímpicos del 26 de julio al 11 de agosto. Como en los celebrados en México en 1968 (empañados por la represión y la matanza de Tlatelolco), la capital francesa tiene un vasto programa cultural que acompañará a la justa deportiva.
Lo inició el año pasado el Museo de Artes Decorativas con la exposición Moda y deporte: De un podio a otro. Más de 450 objetos de ropa, zapatillas y accesorios diversos, fotografías, bocetos, revistas, carteles, pinturas, esculturas y videos muestran la evolución de la ropa deportiva, su influencia en la moda y las conexiones que unen a ambas actividades.
En un recorrido cronológico, la exposición se abre con un espacio dedicado a la antigüedad, cuando el deporte se asociaba con la desnudez. Sigue con la vestimenta y los artículos utilizados en los siglos XIX y XX para el deporte individual (montañismo, patinaje, esquí) y de equipo, como futbol, basquetbol y rugby.
No falta la bicicleta, vehículo empleado al principio sólo por hombres y que luego las mujeres la convirtieron en herramienta de emancipación.
Los pioneros
En la segunda mitad del siglo pasado, la ropa deportiva empezó a ocupar más importancia. Grandes creadores de la moda, como Jean Patou, Jeanne Lanvin, Gabrielle Chanel, Elsa Schiaparelli, Issey Miyake y Balmain, entre otros, figuran como los pioneros que se interesaron por el universo deportivo y lo transcribieron en sus creaciones de alta costura.
La ropa deportiva tomó más auge hace medio siglo gracias a un nuevo ideal corporal vinculado con el culturismo y la práctica aeróbica. Se impone la comodidad de las prendas utilizadas.
La carrera y los tenis se convirtieron en imprescindibles de la moda tanto para uso diario como para la alta costura.
Marcas se hicieron de renombre al imponer sus modelos, en los que aprovecharon las nuevas técnicas y materiales empleados en su elaboración.
México 68 está presente en la exposición con la clásica foto de Rich Clarkson, que captó la protesta de los atletas estadunidenses Tommie Smith, John Carlos y Peter Norman con su saludo del poder negro, así como con los trajes usados por las edecanes, fabricados por Angie Amrein y Julia Johnson-Marshall.