México se ha convertido en un país fértil para hacer negocios, como resultado del buen funcionamiento de la economía y por una serie de cambios que se instauraron durante el presente gobierno, expresa Jorge Arce, director general de HSBC México.

En entrevista previa a la 87 Convención Bancaria, que se realizará en Acapulco, Guerrero, Arce destaca algunos cambios que se hicieron durante la administración de López Obrador, como la reforma de pensiones o la eliminación de la subcontratación laboral.

Por ello en el país se ha generado un caldo de cultivo positivo que ha contribuido a incrementar los niveles de crecimiento, que pueden ir al alza. Al inversionista –explica– le encanta México, al mismo tiempo que nuestro país se ha convertido también en una máquina exportadora.

–¿Cómo se ve 2024 en términos económicos y bancarios?

–Este año va bien, el crecimiento no es tan rápido como en 2023, estamos viendo una desaceleración en ciertos sectores, en el exportador vimos a principios de año una disminución en la tasa de crecimiento, pero sigue avanzando de una manera muy robusta, aunque el peso ya le está pegando.

Los sectores agrícola y de consumo están más fuertes que nunca, México está a total empleo, formal e informal, todos los mexicanos que quieren trabajo están trabajando y eso no es muy normal, entonces es una economía robusta y fuerte.

–¿La dinámica socioeconómica está perfectamente equilibrada?

–Está funcionando la economía y va bien, hay áreas de oportunidad sin duda alguna, pero a pesar de un entorno global que se complicó mucho después de la pandemia, salimos fuertes, robustos y fortalecidos de esa situación; así, el país se beneficia.

Es un lugar muy fértil para hacer negocios.

–¿Qué tanto se le puede atribuir esta fertilidad a la gestión del gobierno y qué tanto al sector privado?

–Este gobierno hizo cosas buenas, la reforma de las Afore es una de las más importantes en materia económica que hemos tenido en los últimos años, en generaciones. El haber aumentado los salarios mínimos ayudó mucho al consumo, quizá podemos discutir si se debió aumentar cuatro veces o dos veces más, hay juicios diferentes, pero que se hayan aumentado los salarios mínimos era importante.

“La reforma a la subcontratación hizo que se eliminaran vicios en la economía y hace que el trabajador tenga más dinero y mejor seguridad social.

“El gobierno tuvo cosas positivas, pero el sector privado –nacional e internacional– es dinámico y creciente, sabe competir y ha invertido más que nunca. Los datos de inversión extranjera directa muestran un año récord en 2023; además, el gobierno ha invertido en obra pública de forma importante, casi 3 por ciento del PIB.

Todo esto hace un caldo de cultivo positivo para que haya crecido el país y pueda seguir creciendo.

–Independientemente de quien gane la elección, ¿qué se le puede pedir al siguiente gobierno?, ¿qué continuar y qué cambiar?

–No importa quien sea el candidato, en materia económica hablan cosas similares, quizá la ruta es diferente, pero se enfocan en que México esté abierto al mundo, que la relación con Estados Unidos siga, que se capture el nearshoring, que ayudemos a la población a una vida mejor, con mejor educación, acceso a salud, inversión en logística, transporte y seguridad.

–¿Podemos decir que este gobierno dejó el terreno fértil para concretar inversiones y la economía mantenga el dinamismo que demuestra?

–Siempre hay áreas de oportunidad, tenemos una base sólida que se construyó en los últimos años en este país, en un par de generaciones construimos una base exportadora, tratados de libre comercio, una banca sana.

“La banca normalmente creaba crisis económicas, que esté tan sana ahorita dice que la situación económica del país es muy sólida y eso habla que las cosas se han hecho bien.

“¿Qué hacer? Invertir más en agua, transmisión eléctrica, energías limpias, logística, tenemos que invertir en nuestro capital humano, en educación de más calidad y más cercana a las necesidades económicas del país… tenemos que hacer muchas cosas. Si se invierte en salud, educación y nos enfocamos mucho en la seguridad, se habla mucho de estado de derecho, pero es muy esotérico.

Estado de derecho es tener policías que cuiden, tener procuradurías que hagan su trabajo, juzgados que funcionen y lo hagan bien, que te sientas seguro en el país es muy muy importante.

–En ese sentido, ¿qué tanto pesan a la hora de invertir y hacer negocios los problemas relacionados con la seguridad?

–Es muy importante, hay partes del país que necesitan inversión fuerte en seguridad y es una responsabilidad compartida, no depende sólo de los gobiernos municipal, estatal o federal, depende de la sociedad, la industria, el sector privado, todos tenemos que poner la seguridad como una prioridad principal. Un país tiene que dar seguridad a sus pobladores, necesitamos asegurarnos de que eso se dé.

–¿Es uno de los principales temas que sobrepone un inversionista antes de venir a México?

–La seguridad siempre está presente en las conversaciones con los inversionistas extranjeros.

–¿Y qué más ve el inversionista extranjero?

–Les encanta México. Antes venían a ver cómo estábamos, ahora vienen a ver dónde contratar gente, dónde es el mejor lugar para poner una planta, quién es un buen contratista para construir, estamos viendo que todos los buenos deseos de los últimos dos años de nearshoring se concretan en inversiones reales.