Falleció el 17 de enero a los 69 años; amigos lo recuerdan con aprecio
Martes 9 de abril de 2024, p. 12
Carlos Rojas Gutiérrez, quien falleció el pasado 17 de enero, estuvo comprometido con los grupos más vulnerables, con los que nunca dejó de trabajar y siempre puso énfasis en la organización comunitaria, fue impulsor de la política social, creador del Programa Nacional de Solidaridad (Pronasol) y un hombre generoso.
Así fue recordado ayer en el homenaje póstumo que se le hizo en la antigua sede del Senado de la República, en presencia de sus hijos, hermanos, familiares, su viuda –la senadora Mónica Fernández– y amigos como Miguel Limón y José Narro Robles.
Rojas Gutiérrez falleció a los 69 años, era ingeniero mecánico por la UNAM, fue funcionario, senador y diputado. Se le conocía como El jefe Rojas.
Fue un hombre sencillo, pero no simple. Era un hombre serio, pero profundamente amoroso. Una de sus grandes virtudes era escuchar y observar
, comentó su hijo Juan Carlos Rojas Sotres. Recordó que trabajó en el Instituto Nacional Indigenista, en Hopelchén, Campeche, y desde ahí comenzó todo
.
Creó el Pronasol –durante el sexenio de Carlos Salinas– es un reto visitar cualquier lugar sin encontrar un logo de Solidaridad, todo México está repleto de sus obras. Desde esta sede mi papá defendió las causas de miles de mexicanos. Fue un hombre genial, aficionado de los Pumas, disfrutaba del beisbol e iba a la lucha libre
.
Cuando se habla de política social no se puede dejar de mencionar a Carlos Rojas, siempre estaba con los de abajo, iba a los lugares más remotos y abandonados
, recordó el senador José Narro Cespedes, organizador del homenaje.
También la senadora Beatriz Paredes manifestó que Rojas Gutiérrez vivió intensamente por sus ideales, se expuso por las causas en las que creyó. Si algo supo sembrar fue amistad
. Con la voz entrecortada, aseveró que fue un funcionario que no se detenía ante inclemencias del tiempo o la escasez presupuestal, sabía del trabajo de campo y podía vincularse con los indígenas, campesinos y sabía hacer amigos.
Celebramos la vida de una persona especial, que caminó la sierra, donde dejó huellas, su estrategia de trabajo fue incidir en las comunidades, sensible ante las circunstancias que se vivían, brindó apoyo para ayudar, impulsó trabajos productivos con la faena y prácticas comunitarias
, sostuvo a su vez Paulina Garrido, de la sociedad cooperativa Tosepan Titaniske.