Pekín. La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, pidió ayer a China que aborde la sobrecapacidad de producción en sectores industriales claves, como parte de su recuperación financiera, al considerar que representa un riesgo a la economía global, incluida a la de México, en momentos que busca alcanzar durante su actual visita al gigante asiático una igualdad de condiciones para las compañías estadunidenses.

En su segundo día de actividades, Yellen aseguró en la sureña megaciudad de Guangzhou, en la provincia de Guangdong, que Estados Unidos busca una relación económica saludable con China que beneficie a ambas partes, pero una relación económica sana debe proporcionar igualdad de condiciones para las empresas y los trabajadores de ambos países.

Señaló que sigue siendo crucial que las dos economías más grandes busquen avances en desafíos globales, como el cambio climático y el sobreendeudamiento en los mercados emergentes y los países en desarrollo, admás de que se comuniquen estrechamente sobre temas de preocupación, como el exceso de capacidad y las acciones económicas relacionadas con la seguridad nacional.

Momento antes, ante la Cámara de Comercio Estadunidense en China, en la ciudad de Cantón, a donde arribó el jueves pasado, la funcionaria precisó que el exceso de capacidad no es un problema nuevo, pero se ha intensificado y estamos viendo riesgos emergentes en nuevos sectores, por lo que alertó: Esto puede socavar los negocios de las empresas y los trabajadores estadunidenses, así como de las empresas de todo el mundo, incluso en India y México.

Achacó este incremento de producción al apoyo directo e indirecto del gobierno a las empresas nacionales con el objetivo de estabilizar su economía. También acusó a Pekín de aplicar prácticas económicas injustas, incluida la imposición de barreras de acceso a empresas extranjeras y la adopción de acciones coercitivas contra compañías estadunidenses.

Los subsidios del gobierno chino y otras políticas de apoyo han alentado a los fabricantes de paneles solares y vehículos eléctricos en China a invertir en fábricas, creando mucha más capacidad de producción de la que el mercado interno puede absorber. La escala masiva de producción ha reducido los costos y ha encendido guerras de precios por tecnologías verdes, una bendición para los consumidores y los esfuerzos por reducir la dependencia global de los combustibles fósiles.

Por la noche, Yellen reiteró en un breve tuit –tras sostener la primera de dos reuniones con el viceprimer ministro chino, He Lifeng– que es crucial que las dos economías más grandes del mundo busquen avances en los desafíos globales y se comuniquen estrechamente sobre las áreas de preocupación.

Este encuentro fue para intercambiar puntos de vista sobre el fortalecimiento de los lazos económicos y comerciales entre ambos países, informó la cadena estatal CGTN. Las potencias han visto crecer el comercio bilateral más de 200 veces desde el establecimiento de relaciones diplomáticas, y el volumen comercial alcanzó los 649 mil 700 millones de dólares en 2023, mostraron datos oficiales citados por el canal.

Se espera que Yellen se reúna de nuevo con He este sábado, con el primer ministro, Li Qiang, el domingo, y el lunes con el gobernador del banco central de China, Pan Gongsheng. Es la segunda visita que realiza a territorio chino en menos de un año, y tras los contactos que ambos países tuvieron en San Francisco, California, en noviembre pasado.