Ciudad Juárez, Chih., Un juez de primera instancia de El Paso, Texas, ordenó la liberación de los migrantes acusados de participar en un motín fronterizo cuando cruzaron en estampida y agredieron a elementos de la Guardia Nacional texana en el río Bravo el pasado 21 de marzo, con el fin de solicitar asilo político.

Por ese incidente, el Departamento de Seguridad Pública de Texas arrestó a 220 personas con cargos de disturbios. De ellas, 39 han sido procesadas para ser liberadas y entregadas al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos.

El informe oficial del caso que dio el Departamento refiere que los indocumentados permanecerán encarcelados y custodiados por la Patrulla Fronteriza.

A partir de la irrupción de migrantes, la policía de Texas ordenó arrestarlos luego de identificarlos.

El juez del caso, Humberto Acosta, emitió su fallo durante una audiencia de fianza por teleconferencia, en la que acusó a la fiscalía del distrito de El Paso de no estar lista para proceder con las audiencias de detención de cada acusado.

El juzgador expresó que es decisión del tribunal que todos los acusados de participación en disturbios serán liberados bajo palabra.

La defensora pública de El Paso, Kelli Childress, solicitó que los imputados permanecieran en la cárcel de esa ciudad, porque si eran liberados y llevados a un centro de migración, los abogados defensores no podrían comunicarse con ellos.

Los arrestos de los solicitantes de asilo fueron realizados por elementos del Departamento de Seguridad Pública de Texas.

En esa ocasión los extranjeros, en su mayoría hombres de Venezuela, derribaron la cerca de alambre de púas a lo largo del río Bravo y se precipitaron hacia la valla fronteriza en el marcador número 36 en el área de Riverside del Valle Inferior de El Paso.