Desde su aparición en los Juegos Olímpicos en Sídney 2000, el tria-tlón mexicano se encuentra en su mejor momento. Cada vez más voces lo ratifican y adelantan un futuro prometedor.

Por muchos años los nombres de Crisanto Grajales e Irving Pérez se mantuvieron entre los más recordados. Hoy, el horizonte es distin-to con el surgimiento de una nueva generación.

Ha crecido bastante. Desde que recuerdo, del triatlón cada vez se habla más. Hubo un periodo en el que siempre fueron los mismos competidores y no habían otras caras, ahora están surgiendo nuevas generaciones, en gran medida gracias al apoyo que ha ido aumentando, reveló Aram Peñaflor, de 24 años.

El mexiquense habla desde la experiencia con la que se clasificó a sus primeros Juegos Olímpicos en noviembre pasado.

La federación ha estado muy metida en detectar talentos deportivos. Han trabajado con un grupo científico, monitoreando y dándoles seguimiento. Por si fuera poco, en Jalisco he notado que se realizan competencias con más frecuencia, lo que ha servido para que las personas conozcan un poco más de este deporte, agregó el toluqueño, parte de los deportistas que han venido a dar el cambio de estafeta.

Con la plaza garantizada por su extraordinario 2023, vislumbra un porvenir incluso mejor al actual, si el fogueo aumentara.

Internacionalmente podemos seguir mejorando, en el caso de la rama varonil tuvimos muy buenos representantes anteriormen-te, pero el triatlón está evolucionando, ahora es mucho más competitivo y el rango de edad ha ido bajando. Entonces creo que hace falta más roce, manifestó el bicampeón centroamericano.

En el caso de las mujeres, han progresado muchísimo, es el equipo más fuerte desde la conformación de un representativo nacional.

Época dorada

La selección femenil atraviesa una época dorada con Rosa María Tapia, entre las 10 mejores competidoras del mundo, y Lizet Rueda en el top 30. Ambas garantiza-ron la plaza olímpica desde finales del 2023.

“Saber que tu compañera está haciendo historia en México y es-tá corriendo de tal manera, o está rodando así de duro, me motiva y es cuando me digo, ‘tengo que ser mejor que ella’. Estoy muy contenta de ver ese crecimiento y que estamos dejando una pequeña semilla a las siguientes generaciones”, compartió Rueda.

Cuando la competencia que te rodea es así de alta, no tienes de otra más que ser también de las mejores, una cosa lleva a la otra. El nivel competitivo en México ha ido evolucionando y hace que todas tengamos que crecer con ello.¿Por qué? Porque te hace dar el extra, salir de tu zona de confort, revela.

Parte del éxito, considera, es la estructura que ha conforma-do la Federación Mexicana de Triatlón. Si bien no es la más sólida, siempre han buscado la manera de llevarnos a la mayor cantidad de justas.

El siguiente paso es la meda-lla olímpica, estiman.Hacia allá vamos, expresó Rueda, mientras Peñaflor aseguró: no estamos muy lejos de conseguirlo.