Martes 30 de enero de 2024, p. 20
Hong Kong., Un tribunal de Hong Kong ordenó ayer la liquidación del endeudado gigante inmobiliario chino Evergrande, una noticia que se conoce en medio de los esfuerzos de China por impulsar su recuperación económica.
Ante la obvia ausencia de avances de la empresa a la hora de presentar una propuesta viable de restructuración (...) considero apropiado que el tribunal emita una orden de liquidación de la empresa
, dictaminó la jueza hongkonesa Linda Chan.
En un comunicado, el director ejecutivo de la empresa, Shawn Sui, calificó de lamentable
la decisión del tribunal.
Sin embargo, la empresa afirmó que seguirá operando, ya que la gran mayoría de sus activos se encuentran en China continental.
Evergrande, con sede en Foshan, en el sur del país, era el mayor promotor inmobiliario de China, con alrededor de 70 mil empleados de tiempo completo a finales de 2022.
La inmobiliaria acumuló deudas por 300 mil mdd
No obstante , acumuló deudas por más de 300 mil millones de dólares y se convirtió en emblema de la crisis inmobiliaria que azota desde hace años a la segunda economía del mundo.
La petición de liquidación fue presentada por primera vez en junio de 2022 por Top Shine, un inversionista en la unidad de Evergrande, Fangchebao. A la empresa se le concedió un breve indulto en diciembre, después de informar que estaba intentando refinar
un nuevo plan de restructuración de deuda.
En los últimos años, el pasivo de Evergrande ha sido adquirido por fondos como Saba Capital Management, liderado por el jefe de los fondos de cobertura estadunidenses, Boaz Weinstein.
Las acciones de la empresa se desplomaron 20.87 por ciento en la bolsa de Hong Kong tras el dictamen de la jueza, por lo que tuvo que interrumpirse su cotización en bolsa.
Antes de que se detuvieran las operaciones, la empresa perdió una quinta parte del precio de sus acciones en Hong Kong. De este modo, Evergrande ahora vale 275 millones de dólares, pero tiene una deuda por 328 mil millones de dólares.
Duncan Wrigley, economista jefe para China de Capital Economics, estimó que los inversionistas tendrán dificultades para recuperar su dinero. Incluso si los tribunales continentales aceptan esto, se enfrentarán a problemas políticos y sociales
, afirmó Wrigley citado por The Telegraph.
Shane Oliver, estratega de la firma de servicios financieros AMP, calificó la decisión judicial como un nuevo paso
en la crisis inmobiliaria del gigante asiático.
Ésta está lejos de ser resuelta y permanece como un lastre sobre la economía china
, añadió.
El fallo llega en un momento en que Pekín está lidiando con una economía de bajo desempeño, su peor mercado inmobiliario en nueve años y un mercado de valores que se hunde cerca de mínimos de cinco años, resumió The Independent.