Opinión
Ver día anteriorMiércoles 17 de enero de 2024Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
En el chopo

Rock en Kennedy Center Honors

E

n 1978 la música disco predominaba entre jóvenes parejas; él y ella sonrientes, perfumados y vestidos para la ocasión, practicaban los pasos travoltianos de moda al compás de Disco Inferno en destellantes discos gabachas. Mientras el rock, sufría uno de los muchos infartos a los que ha sobrevivido. Ese mismo año se instituyeron los Kennedy Center Honors que se otorgan anualmente a cinco artistas de distintas disciplinas escénicas, entre ellas, la música. Son un reconocimiento de alto honor entregado por el gobierno de Estados Unidos a personalidades artísticas de distintos lares. La ceremonia se realiza en diciembre en el Kennedy Center de Washington DC y la encabeza el presidente de aquel país. Sólo Donald Trump ha brillado, por su ausencia, en 2017.

Esta entrega tardó años en voltear a ver la existencia del rock y considerarlo un género digno al aceptarlo como una manifestación artística creativa. Transcurrieron tres lustros para que B.B. King fuera recibido en el palco de honor del Kennedy Center entre aplausos, por actores, directores y músicos emergentes de los grandes corporativos del espectáculo. Era 1995. Después le siguieron Johnny Cash en 96 y el premio Nobel Bob Dylan en 1997; fue en el año 2000 cuando el padre del rocanrol, Chuck Berry, disfrutó de este tributo oficial. Otros jefes rocanroleros inscritos en esta lista son James Brown, 2003; Tina Turner, 2005; Pete Townshend y Roger Daltrey, 2008; Bruce Springsteen 2009. Mientras, Paul McCartney en 2010, Led Zeppelin (John Paul Jones, Jimmy Page y Robert Plant) en 2012 y Carlos Santana en 2013. En estos tres últimos nombres hacemos un alto porque, la neta, es conmovedor ver como sus miradas transmiten la emoción al ver/escuchar cómo su obra sonora es interpretado por músicos de gran renombre y con alta fidelidad en su ejecución. Las reacciones de homenajeados, de asistentes y hasta de los políticos –incluyendo a los mandatarios presentes– son de celebración no exenta de nostalgia y gratitud. Es chido ver como el rock genera entre gente de frac o smoking la ovación espontánea y la franca sonrisa.

Lo anterior, querido lector, lo puede constatar en YouTube. No queremos dejar de mencionar que fue Pete Seeger en 1994 el primer disidente en recibir el Kennedy Center Honors; también hay que deleitarse con las emisiones dedicadas a Joan Báez, 2020; Eagles (Glenn Frey, Don Henley, Timothy B. Schmit y Joe Walsh) 2016. Y con otras luminarias como Dave Brubeck, Buddy Guy, Sting. En la más reciente ceremonia –2023– Dionne Warwick y Barry Gibb fueron dos de los premiados. Urgen en nuestro país estímulos de este tipo ¿no?

Coctel roquero en el festival Vive Latino

En noviembre pasado el festival Vive Latino cumplió 25 años de su primera emisión. Los cambios en el formato, el cartel y en las actividades complementarias han sido sustanciales para seguir convocando público. En este 2024 la combinación de propuestas rítmicas y letrísticas, maniqueísmo aparte, están para atestiguarlas: Cartel de Santa, Maná; Bratty, Kerigma; Belanova, The Warning; San Pascualito Rey, Las Ultrasónicas. Aunque para esto, hay que asistir los dos días. PD: hablando de reconocimientos, sería buena onda, a manera de homenaje, que el Vive 2025 incluyera a dos/tres grupos de aquella primera generación de rocanroleros; hablamos de Los Locos del Ritmo, Los Teen Tops, Los Rebeldes del Rock y otras agrupaciones pioneras. Salú.