Domingo 14 de enero de 2024, p. 4
La constante en las acciones que realizan las autoridades para localizar a personas desaparecidas es el nulo avance en las indagatorias, rechazo a abrir nuevas líneas de investigación y escaso apoyo de los agentes del Ministerio Público y de las fiscalías. Además, en muchas ocasiones los testigos se niegan a declarar sobre los hechos, por temor a represalias, plantearon a La Jornada familiares de víctimas.
Nadia Romero, hermana de Jonathan Romero Gil, y Alicia García, quien busca a su hijo Daniel Mares García, dijeron que aunque los hechos sean recientes o tengan años, la situación es la misma: estancamiento, pérdida de pruebas y, muchas veces, desinterés de las autoridades.
Entrevistadas por separado, en el contexto de una reunión de colectivos con la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) en la Secretaría de Gobernación, precisaron que no se rendirán hasta encontrar a sus familiares, y vendrán a la Ciudad de México las veces que sea necesario para obtener justicia.
No estamos aquí por gusto; exigimos justicia; que las instituciones gubernamentales no nos nieguen la ayuda
, señaló la integrante del colectivo Ayuda a Regresar a Luis Alberto Callejas.
Narró que se cumplirán seis meses desde que su hijo Daniel, de 31 años, fue desaparecido en Tuxpan, Veracruz. Fue el 14 de julio de 2023. El trabajaba como cajero en un cibercafé del centro de Tuxpan; al parecer se lo llevaron sujetos armados. No tenemos ningún otro indicio. La fiscalía no ha seguido el caso y tampoco los ministeriales. Se ha ido a declarar, y no nos mandan llamar. El fiscal Mariano Villegas dice que nos presentemos cuando tengamos la necesidad de ver la carpeta, pero el señor se niega a todo y no nos da ninguna respuesta
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Aseguró que su hijo no tenía problemas con nadie; eso arrojan las investigaciones, y nosotros los corroboramos
.
Al hermano de Nadia lo desaparecieron, junto con un amigo, presuntos policías municipales de Acapulco, Guerrero, el 5 de diciembre de 2018 en la Costera. El otro joven fue encontrado muerto y con signos tortura al día siguiente.
Nadia señaló que en dos ocasiones la carpeta de investigación se perdió. En la primera sacaron la mayor parte de las evidencias: fotos y videos de cuando fueron a tirar el cuerpo de su amigo; en la segunda, el al agente del Ministerio Público que había ayudado a reconstruir la carpeta fue despedido, y se la llevó
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Jonathan estaba a punto de obtener su título de abogado, tenía 26 años; Nadia contó emocionada que apenas tramitamos su título. Nos lo entregaron en un evento en Acapulco. Ha sido de las cosas más tristes. No podía dejar de llorar, pensando lo feliz que estaría él en ese momento. Ahora la pesquisa está estancada, no ha habido una línea de investigación nueva, nos dan largas y largas
.
“Recurrimos a derechos humanos de Guerrero y el abogado se rió de nosotras: ‘para qué lo busca, se fue con la novia, ya verá que regresa’, dijo. Todo eso lo publicamos en Facebook, y lo despidieron”.
Ambas han participado en manifestaciones en la Ciudad de México y en sus estados, pero nada saben de sus familiares. Es lo mismo que experimentan las cientos de mujeres que esta semana se reunieron con funcionarios de la Comisión Nacional de Búsqueda y la CEAV.