A pesar que entre 2012 y 2022 los accidentes vehiculares asociados al consumo de alcohol bajaron de 11.6 a 7.7 por ciento, entre las causas más comunes de estos percances están el exceso de velocidad y los efectos del alcohol y otras sustancias sicoactivas, alertó la Secretaría de Salud (Ssa).

En época vacacional, los siniestros de tránsito y en el hogar se incrementan en promedio entre 15 y 20 por ciento. En 2021, del total de fallecimientos por accidentes, 66.1 por ciento fueron en percances viales; es decir, 14 mil 715 defunciones, y en 2022, 8.1 por ciento de quienes sufrieron un siniestro vial fatal presentaron aliento alcohólico.

De acuerdo con datos del Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (STConapra) de la Ssa, los accidentes en el hogar se vinculan en la mayoría de los casos a que niños y adolescentes permanecen más tiempo en casa durante los periodos de asueto; también al empleo de calentadores, anafres o braseros para combatir el frío en viviendas y pirotecnia, entre otras.

Después de los accidentes viales, los más comunes, con un desenlace fatal, son las caídas, con 9.3 por ciento, equivalentes 2 mil 72 defunciones; asfixias, 8.9 por ciento, con mil 973 decesos; ahogamientos, 7.7 por ciento o mil 719 muertes; envenenamientos e intoxicaciones, 5.4 por ciento y mil 211 defunciones, y quemaduras, 2.5 por ciento o 563 decesos.

En esta temporada invernal, el STConapra, indicó que se promueve el abordaje integral para evitar lesiones accidentales, mediante la identificación de los principales factores de riesgo, pues alertó que en las fiestas decembrinas se registran incendios en viviendas a causa de iluminación decorativa, en gran medida a causa de la sobrecarga de enchufes y contactos, por lo que llamó a no adquirir productos en el mercado informal.

Entre las principales recomendaciones se incluye: no ingerir alcohol en caso de conducir un vehículo automotor, no usar fuegos artificiales, mucho menos permitir que niñas y niños los manipulen o jueguen con fuego, restringir el acceso a menores a las cocinas, principalmente en días de fiesta; nunca rellenar envases de refrescos, jugo o agua con productos químicos, y no dejar encendidas estufas, calentadores o braseros durante la noche para mantener el calor en la vivienda.