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El Correo Ilustrado

Proponen que los gobiernos controlen sus recursos naturales

S

ería de gran importancia que en América Latina, África y otras regiones los gobiernos ejerzan el control sobre sus recursos naturales y materias primas, entendiéndose el cumplimiento de lo que es la soberanía, el respeto a los territorios, reservas ecológicas y pueblos originarios, con la realización de verdaderas consultas, autodeterminación, entre otros, es decir aplicar el poder político de todo Estado con independencia del exterior, resolviendo preferentemente a favor del pueblo y de la nación.

Se trata de prevenir y evitar el saqueo irracional y el deterioro de la naturaleza por prácticas que realizan empresas y compañías transnacionales para enriquecerse.

El ejemplo que se pone a la vista es el litio de mucho interés del capital para el desarrollo de equipos de alta tecnología.

Varios países de América Latina poseen este elemento: Argentina, Bolivia, Chile, Perú, México, entre otros, que, bajo la explotación lo hacen grandes trasnacionales de países con alta tecnología.

Por lo tanto, debe haber sin ningún titubeo leyes aplicadas por el Estado, es decir, una regulación jurídica bien definida sobre este material y otros.

Es a través del cuidado y vigilancia de las materias primas que haya equidad en cuanto al beneficio mutuo, así como el justo pago de impuestos y regalías que deben distribuirse en los estados o provincias donde se extrae dicho material para el desarrollo de los municipios y combate a la pobreza.

Mientras que algunos países con gobiernos endebles o entreguistas ven las materias primas –incluyendo el litio– como algo sin mucha importancia o algo normal, donde hay deducibles y amplias garantías a esta industria, otros como México deben cuidar toda materia prima porque estas son finitas, se acabarán algún día.

El debate político en las elecciones que vienen, las y los candidatos deben fijar sus posiciones de cómo será el gobierno en materia económica que debe ser en favor del pueblo y la nación.

Luis Langarica A.

Inácio Lula da Silva, constructor de la paz y solidario siempre

En el estado de Pernambuco se recuerda siempre a un brasileño entusiasta y solidario desde su juventud en el municipio de Caetés. El obrero metalúrgico que trabajó por la unidad sindical y el diálogo entre los trabajadores.

Se perfilaba como dirigente político para Caetés, Pernambuco y la República Federativa de Brasil. Lo logró. Es el primer obrero en la historia reciente que llegó al Palacio de Planalto La Alvorada como presidente, al comenzar el siglo XXI.

Hace 19 años sugirió a los países del llamado Grupo de Río se reunieran para analizar la situación del pueblo haitiano, tras el derrocamiento del gobierno de Jean Bertrand Aristide, y, además se comprometieran en la reconstrucción del país caribeño.

Dos décadas después, Lula da Silva, demuestra ser un constructor de la paz, dentro y fuera de Brasil. Ha llamado a que se establezca un cese el fuego en la franja de Gaza, Palestina, y en ese contexto de un genocidio que enluta a las y los palestinos, además de entristecer a una parte importante de la Humanidad, promueve un encuentro para el diálogo por el tema del Esequibo entre Venezuela y Guyana, convencido de que es un deber evitar guerras e injusticias.

Lula da Silva es un activista, luchador social, amigo de los pueblos, defensor de la soberanía, promotor de la integración de nuestra América, soñador despierto de la hermandad mundial y además un presidente humanista y progresista de Brasil.

Fernando Acosta Riveros

Agradecimiento al EZLN por levantarse en armas hace 30 años

Por este medio agradezco al pueblo chiapaneco que se levantó en armas hace 30 años contra el gobierno espurio salinista.

El 1º de enero de hace 30 años un grupo de alzados zapatistas le declaró la guerra al espurio gobierno que en retirada se aprestaba a vender el país al primer mundo, que ya se frotaba las manos, pues no sólo tendría todos nuestros recursos naturales estratégicos, sino también una mano de obra casi esclava.

Todos y todas recordamos aquel momento de nuestra historia de cómo se le descompuso el rostro al inefable Carlos Salinas de Gortari, al prian y a la oligarquía que hoy se aferra a regresarnos a ese pasado, ante la irrupción de los encapuchados zapatistas que con fusiles de madera tomaron varios municipios chiapanecos y la conciencia de millones de mexicanos en un grito de basta ya de tanta opresión y olvido para los más pobres de los pobres, como son los pueblos indígenas, por parte de quienes se solazaban de corrupción e impunidad, y que pensaban que nunca nadie los iba a enfrentar.

Gracias, muchas gracias al EZLN y a quienes desde las trincheras civiles y sociales los arroparon, por esos instantes estelares que impidieron que una bola de sátrapas y vendepatrias nos aventaran al desfiladero del cual no hubiéramos salido fácilmente.

Gracias, porque con su estallido ayudaron grandemente a que el pueblo de México, luego de décadas de malos gobiernos priístas y neoliberales, luego de múltiples represiones y masacres, de fraudes electorales, expulsaran de la Presidencia por medio del voto a la oligarquía corrupta y sanguinaria que hoy se opone radicalmente a la transformación.

Raymundo Colín Chávez