a Liga Mx Femenil está entrampada. Torneo a torneo tiene sólo cuatro aspirantes serios al título, aunque por lo general aparece algún club que brinca y manotea queriendo sentarse en la mesa de los cuatro fantásticos, pero que al final se va frustrado, con las manos vacías... Es mucha la ventaja que han tomado Monterrey, América, Chivas y, principalmente, Tigres –que acaricia su sexto cetro–, sobre el resto de los equipos a lo largo de 12 certámenes, donde invariablemente aparecen los mismos coleros, prueba incuestionable de que a sus dueños no les interesa el futbol de mujeres.

La pandemia sorprendió nadando sin traje de baño a muchos equipos del máximo circuito, los cuales batallan arduamente para pagar su nómina y lo último que quieren es echarse el compromiso de una plantilla de mujeres. La mayoría lo asumió a regañadientes, presionados por la Federación Mexicana de Futbol, a su vez exigida por la FIFA. No obstante, entre los eternos coleros hay equipos de magnates adictos a fanfarronear en redes sociales, banqueros, dueños de empresas, pero rehúsan invertir con seriedad. El caso obvio es Tv Azteca y el triste Mazatlán.

Tras sonados fracasos con diversos equipos como Chiapas, Veracruz, Atlas... la televisora del Ajusco había encontrado relativo éxito con el Morelia, pero se quejó de entradas pobres en el estadio Morelos e hizo la mudanza a Mazatlán en 2020, con todo y el cuadro femenil. La euforia duró poco. El plantel de las llamadas cañoneras es uno de los más constantes en la parte inferior de la tabla de posiciones, su lugar favorito es el peldaño 17, aunque este Apertura 2023 fue todavía peor y concluyó en el último.

Más batalla dio en juntas, asambleas y conciliábulos Alejandro Irarragorri; luchó con una energía y denuedo jamás visto en sus equipos Atlas y Santos para eliminar el descenso y ascenso, una vez logrado, tranquilamente se dedica a vender jugadores evadiendo impuestos (tiene una investigación desde diciembre), a capitalizar sus arcas, y enfocarse en el consentido del momento, el Sporting de Gijón. Sus planteles dieron el bajón en rendimiento, más marcado fue el femenil, que terminó en sitio 13 de 18.

Jesús Martínez, de Grupo Pachuca, no estuvo a favor de quitar el descenso, pero bien que lo aprovecha. Descuidó a Pachuca y León en ambas ramas; justificó al señalar que iban a debutar a varios jóvenes, aunque en el panorama no se vislumbra otra Charlyn Corral, y se abocó con todas sus baterías al también asturiano Real Oviedo. El reto es enorme, porque mientras el gobierno hidalguense en su momento le dio toda clase de facilidades, en España se quejó de los precios; el plan es construir una ciudad deportiva.

Las Tuzas son la gran decepción del circuito, pues aunque se coronaron en el torneo de ensayo y eran, junto con Xolas, la gran promesa, no han podido alzar el cetro de monarcas. De poco le sirvió contar entre sus filas con la campeona del mundo, la española Jennifer Hermoso, y otras destacadas como Mónica Ocampo (autora del considerado mejor gol en un Mundial femenil) y la ex Pichichi Corral... El técnico Juan Carlos Cacho fue cesado luego de acariciar dos veces el cetro, en el Clausura 2022 y 2023, finales que perdió ante Chivas y América.

El impulso a la Liga femenil requiere de entusiasmo, trabajo y visión empresarial, difícilmente se podrá caminar hacia la paridad salarial en medio del desinterés. Hay dueños que pueden pero no quieren, como los ya mencionados. Otros, con capacidad económica, parecen extraviados, indecisos: Toluca, Xolas, Juárez, Cruz Azul… Los Pumas increíblemente adoptaron a Leonardo Cuéllar a pesar de su fracaso en el Tri y su obsesión por las mexico-estadunidenses. Otros como Necaxa, San Luis y Querétaro ni pueden ni quieren.

Otra evidencia de que las cosas no van bien fue la presentación del plantel Sub-17 en el Mundial de Indonesia, donde el martes el Tri de Raúl Chabrand fue apaleado y echado de la contienda al son de 5-0 por su similar de Mali. Ya nada más para el recuerdo quedan los títulos de Perú 2005 y México 2011… Con el polémico triunfo en penales sobre Honduras, las aguas se apaciguaron, el técnico Jaime Lozano salvó el pellejo pero es obvio que no ha convencido ni tiene contentos a sus jefes. Los federativos están a la espera de la multa por el grito homofóbico que retumbó varias veces en el estadio Azteca.