Se está lejos del cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sustentable (ODS) en materia de igualdad de género, sostuvo Nayeli Sánchez Macías, coordinadora de la Iniciativa Spotlight en ONU Mujeres México.

En el encuentro Aprendizaje del Foro del Grupo de Estudios sobre Desigualdades de Género, expuso que la resistencia a la igualdad y una falta crónica de inversión suficiente en el rubro son los factores claves en un lento progreso.

En tal sentido, insistió en que debe haber “financiación para el desarrollo y priorizar políticas y programas comprometidos en cerrar las brechas de género y empoderar a mujeres y niñas.

La igualdad de género debe ser un objetivo en sí mismo, pero también es fundamental para el logro de todos los demás de la agenda de desarrollo.

El ODS 5 tiene como meta facilitar a mujeres y niñas igualdad en el acceso a la educación y atención médica, en oportunidades para conseguir un trabajo digno y representación en los procesos de adopción de decisiones políticas y económicas.

En un informe sobre los ODS, emitido este año, la Organización de Naciones Unidas precisa que a escala global apenas 15.4 de los indicadores del ODS 5 están bien encaminados, 61.5 están moderadamente encauzados y 23.1 por ciento están lejos o muy lejos de las metas para 2030.

Advierte que los avances han sido demasiado lentos. Por ejemplo, al ritmo actual, se calcula que se necesitarían 300 años para acabar con el matrimonio infantil, 286 años para llenar los vacíos en la protección jurídica y eliminar las leyes discriminatorias, 140 años para que las mujeres estén representadas de manera igualitaria en cargos de poder y liderazgo en los lugares de trabajo y 47 años para lograr la igualdad de representación en los parlamentos nacionales.

De acuerdo con la ONU, para avanzar en el ODS 5 se requiere liderazgo político, inversiones y reformas normativas integrales para desmantelar las barreras sistémicas. A mitad del camino de los ODS, en el avance del ODS 5 las metas están muy lejos de lo planteado, a pesar de ser un fundamental de la agenda 2030; es primordial tener muy claro también invertir en la prevención y reducir la ocurrencia de violencia de género con intervenciones multisectoriales y multidisciplinarias, hacer cambios institucionales, sociales, comunitarios e individuales.

Además, remarcó que se requiere invertir en políticas orientadas a promover el empoderamiento económico de las mujeres, su educación y mayor presencia en los espacios de toma de decisiones.