"La Jornada del Campo"
Número 194 Suplemento Informativo de La Jornada Directora General: Carmen Lira Saade Director Fundador: Carlos Payán Velver
Miscelánea
Áreas naturales y tierras de cultivoÁreas naturales y tierras de cultivo

Nutriólogo del Campo

La milpa ¿aún alimenta a las familias campesinas?

Héctor Eduardo Sentíes Torres Egresado de la Escuela de Dietética y Nutrición del ISSSTE [email protected]

En la actualidad se sabe que la Dieta de la Milpa es un modelo de alimentación que cumple con los requerimientos para una alimentación rica, variada, equilibrada y completa. Éste modelo es producto de cientos de años de experimentación y observación de la naturaleza y una constante interacción por parte de los campesinos y agricultores para tener cultivos asociados que se beneficien unos de otros para crecer y dar frutos, así como ofrecer alimentos que se complementan entre sí, por ejemplo el maíz sirve de tutor para que el frijol se pueda enredar en el tallo y crecer de forma idónea, el frijol ayuda a fijar nitrógeno a la tierra, brindado un nutrimento esencial para una tierra fértil. (Éste tema será motivo para una siguiente miscelánea)

Inclusive más allá de lo práctico y real, la milpa también se ha romantizado, ya que actualmente la pérdida de territorios ha derivado en la pérdida de tierras de cultivo propias de agricultores y campesinos. Esto da como resultado una baja, y a veces nula, accesibilidad a productos de la milpa por parte de los propios campesinos y sus familias. Es alarmante la pérdida de territorio en manos de los campesinos debido a una agricultura extractiva e industrializada que sirve principalmente a intereses económicos de grandes consorcios trasnacionales, los cuales no toman en cuenta el bienestar social y la salud de las comunidades originarias y campesinas. Otro factor que influye a la pérdida de tierras de cultivo es la gentrificación rural, la cual es el encarecimiento de las tierras debido a la alta demanda de espacios naturales para la vivienda de personas con altos ingresos económicos.

Aquí nos encontramos estos escenarios: el agricultor vende sus tierras y solo puede cultivar en espacios muy pequeños que no permiten cubrir los requerimientos de alimento para la familia. El agricultor ahora trabaja para un tercero y requiere de comprar sus alimentos en lugar de cultivarlos. Por lo que ahora hay que priorizar los gastos y muchas ocasiones la alimentación se ve afectada e influida por alimentos industriales e ultra-procesados de bajo costo y no siempre son de la mejor calidad en cuanto a nutrimentos.

Resulta urgente el fortalecimiento de un sistema agroalimentario saludable que considere la identidad de los pueblos originarios, su patrimonio gastronómico y que se sustente en la gran diversidad cultural y agro-biodiversidad. Paradójicamente, en un país con una extensa biodiversidad alimentaria como lo es la República Mexicana, existen índices alarmantes de obesidad, sobrepeso y desnutrición crónico degenerativas derivadas del sobre peso y obesidad y la pérdida de diversidad natural y cultural.

En estos momentos es de vital importancia atender los problemas de salud alimentaria desde una visión integradora y multidisciplinaria para ir disminuyendo los costos sociales y ambientales que provoca la desnutrición, las enfermedades

Viendo la agricultura desde la perspectiva del agricultor y el consumo de una alimentación equilibrada y completa, variada… ya no tiene acceso a los alimentos de la milpa

Viendo la agricultura desde el consumo en las ciudades, sabemos que los productos del campo son una muy buena opción para una buena alimentación, además de que forman parte de nuestra identidad y gusto culinario, sin embargo se requiere de voltear a ver quiénes cultivan nuestro alimento, bajo qué condiciones y su nivel de accesibilidad a los mismos productos del campo. Así podremos velar por la salud en zonas urbanas y rurales y garantizar el acceso a una buena alimentación en toda la población

La intrínseca relación entre medio ambiente y alimentación, como fenómeno bio - socio - cultural y fuente primaria de salud, evidencia que los procesos en la producción de alimentos y aprovechamiento de los recursos naturales deben de tomar en cuenta la biodiversidad y el tejido social en favor del bienestar físico individual y colectivo para garantizar el acceso a alimentos y recursos en general para las generaciones actuales y la venideras. En México la obtención de alimentos involucra a un sistema de producción agrícola campesina y de recolección silvestre: el sistema de siembra de la milpa, huertos caseros y comunitarios, plantas, hongos y frutos silvestres, árboles y arbustos frutales en un sistema de manejo agroforestal, la caza de animales, recursos pecuarios, animales de traspatio y pastoreo para el consumo y ganadería sustentable a pequeña escala. La siembra diversificada es la base de la alimentación y a nivel mundial este tipo de agricultura abastece el 70% de la producción total de alimentos. ¿Hasta qué punto debemos de cuidar lo que comemos e influir para garantizar una buena alimentación para todos y en todo momento? •

Milpa tropical.Milpa tropical.