Ginebra. Israel volvió a exigir ayer la renuncia del secretario general de la Organización de Naciones Un idas (ONU), Antonio Guterres, al tiempo que Estados Unidos aseguró que grupos islamitas tienen un centro de comando debajo del asediado hospital Al Shifa, como asegura Tel Aviv.

El canciller israelí, Eli Cohen, acusó a Guterres de defender una postura equidistante con Hamas, y declaró que el secretario general, como todas las naciones libres, debería decir alto y claro: liberen a Gaza de Hamas.

El diario británico The Guardian recordó que Israel demandó la renuncia de Guterres el mes pasado, después de que éste pidió una pausa humanitaria y subrayó que es importante reconocer que los ataques de Hamas no ocurrieron en el vacío, al resaltar los 56 años de ocupación sofocante sufrida por el pueblo palestino.

En tanto, John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, acusó que Hamas y la Yihad Islámica operan un núcleo de comando y control desde Al Shifa, en la ciudad de Gaza, y eso es un crimen de guerra, al respaldar la narrativa de Israel para centrar sus acciones militares en esas instalaciones hospitalarias.

Hamas rechazó las acusaciones y sostuvo que tales declaraciones dan luz verde a la ocupación israelí, para que perpetre más matanzas en hospitales, con el objetivo de destrozar el sistema sanitario de Gaza y desplazar a los palestinos.

Turquía presentó una demanda contra el premier israelí, Benjamin Netanyahu, ante la Corte Penal Internacional, acusándolo de genocidio y otros crímenes de lesa humanidad, denuncia que el canciller alemán, Olaf Scholz, calificó de absurda.

Estados Unidos y Reino Unido impusieron una tercera ronda de sanciones contra individuos y entidades vinculadas a Hamas.