El oficio enviado al Poder Ejecutivo por la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña, con el que respaldó que se destinaran los recursos de los fideicomisos del Poder Judicial para los damnificados en Acapulco, “una de dos: o era un plan con maña de decir: ‘Sí, pero vamos a aprobar los amparos’, o ella sí tenía o tiene esa intención, pero no pudo porque los intereses creados la sometieron”, sostuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador ayer en Cajeme, Sonora.

Durante su conferencia de prensa matutina, recordó que a pesar de que el Poder Legislativo canceló los fideicomisos que, dijo, tenía el Poder Judicial para garantizar privilegios a los altos funcionarios del Poder Judicial, sueldos de 700 mil pesos mensuales y otras prebendas, persisten dificultades para hacer uso de esos recursos y destinarlos para la reconstrucción del puerto de Acapulco tras el paso del huracán Otis, debido a los amparos promovidos por los propios integrantes del sector judicial.

Y pese al aval de la ministra Piña, empiezan a interponer amparos los mismos jueces del Poder Judicial, una lluvia de amparos, y se convierten en juez y parte, y no quieren entregar los 15 mil millones de pesos. Ahora dicen que hasta que se resuelvan los amparos. Pues yo voy a estar recordándoles que ahí tienen esos expedientes y que resuelvan lo más pronto posible para que se aclare, agregó.

El mandatario también dio a conocer que tiene lista la terna que propondrá para sustituir al ministro Arturo Zaldívar, quien presentó su renuncia a su cargo. Se trata de tres mujeres con perfiles para esta posición. La enviará mañana, en cuanto apruebe el Senado la renuncia.

También se pronunció porque se investigue el caso del ex comisionado del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Óscar Guerra Ford, señalado por presuntamente pagar con presupuesto del organismo cuentas en un table dance, y aprovechó para refrendar su crítica a este tipo de órganos autónomos.