Washington. El presidente estadunidense, Joe Biden, y su par chino, Xi Jinping, están a punto de anunciar un acuerdo para que China adopte enérgicas medidas contra la fabricación y exportación de fentanilo, informó ayer Bloomberg, que citó fuentes familiarizadas con el asunto.

Así, en virtud del acuerdo Pekín perseguirá a las empresas químicas para detener el flujo de fentanilo y de los materiales utilizados para su fabricación.

A cambio, según Bloomberg, el gobierno de Biden levantaría las restricciones impuestas al instituto de policía forense de China.

Está previsto que el acuerdo se anuncie mañana, cuando ambos líderes se reúnan en San Francisco, al margen de la cumbre del Foro Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).

Al cierre de esta edición ni Washington ni Pekín confirmaron el reporte de Bloomberg.

Horas antes, China manifestó que espera que Estados Unidos cumpla su promesa de no buscar una nueva guerra fría o un conflicto entre ambos países y se hable de paz y desarrollo mundial en la reunión del APEC, mencionó ayer la cancillería del gigante asiático.

Biden llega hoy a San Francisco para liderar la cumbre de las 21 economías del APEC. La ciudad intenta recuperar su imagen de escenario de innovación tecnológica y sacudirse las críticas ganadas en los últimos años por el aumento del crimen y la población sin techo.

Se espera que Biden y Xi se reúnan mañana (la primera vez desde noviembre del año pasado en la cumbre del G-20 en Bali) para tratar algunos temas candentes, como Taiwán, cuya soberanía reivindica Pekín.

La cumbre del APEC se realiza este año en medio de fuertes tensiones entre ambas potencias, y con el telón de fondo de las guerras de Israel y Hamas en la franja de Gaza, así como Rusia y Ucrania.

China reclamó un alto el fuego inmediato para frenar el conflicto en Medio Oriente, al igual que lo hizo Indonesia, otro de los integrantes del APEC.

En tanto, Estados Unidos y Corea del Sur actualizaron un acuerdo bilateral de seguridad con el propósito de enfrentar con más efectividad la amenaza nuclear y misilística de Corea del Norte, durante una reunión en Seúl de sus altos mandos militares. Pyongyang, que no participa de la APEC, tildó el hecho de confabulación.