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Los relatos de Marta, incitación para desaprender el machismo

La primera novela de María Alatriste convoca a romper los estereotipos de género

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▲ La narradora María Alatriste también es investigadora en temas de inclusión y diversidad.Foto cortesía Adolfo Sesto
 
Periódico La Jornada
Jueves 9 de noviembre de 2023, p. 4

La novela Los relatos de Marta es una narración ligera desde la perspectiva de la protagonista, quien fue víctima de violencia de género, con el fin de que el lector se adentre en los varios niveles de esta situación, explicó la autora del libro, María Alatriste (CDMX, 1986), quien también es investigadora de temas de inclusión y diversidad.

En entrevista con La Jornada dijo que su personaje ejerce siempre una actitud confrontativa y de tomar decisiones sobre su vida, su cuerpo y su visión. El eterno debate de reconocer lo que le enseñaron y desaprenderlo le trae dilemas que la llenan de libertad, pero también de dudas y culpas, de exclusión en su entorno.

Alatriste destacó la esperanza de que su primera narración, editada por Ediquid, provoque empatía en los lectores e incluso cierta incomodidad para llamarlos a la reflexión y que se pregunten sobre el sistema de cosas existente.

De esta forma, continuó la autora, espera que las lectoras y los hombres que rompen el estereotipo se pregunten si hacen las cosas porque quieren o porque les dijeron, si están programados o están viviendo su vida conforme a sus propios límites.

Lamentó que hay muchos aprendizajes femeninos que crean niñas frágiles, predispuestas a complacer, sobre todo a los hombres, a competir entre mujeres para ver quién es la más bonita y a elegir carreras que las limitan en cuanto a las oportunidades laborales y hacen muy difícil competir con varones.

Alatriste destacó que le fascina Marta porque vive su sexualidad con el fin de complacerse a ella misma y para experimentar y saber qué le gusta, aunque enfrenta el hecho de que, si se lo muestra a un hombre, él puede pensar que es una piruja y rechazarla por ello.

Añadió que todavía hay un concepto de la virginidad asquerosamente sobrevalorado e impuesto como si fuera una virtud. Marta va diseccionando estos prejuicios y poniendo en tela de juicio la desigualdad entre la vida sexual de un hombre y la de una mujer.

La novela describe, continuó María Alatriste, las jerarquías establecidas en la familia, los roles y las expectativas que debe cumplir una mujer, así como el machismo de los papeles masculinos, femeninos, de padre y de madre que se heredan a través de generaciones, sin tomar en cuenta la personalidad, historia y destino de cada uno de los integrantes.

El libro contiene un capítulo titulado Jerarquías, el cual aborda el tema del trabajo y habla de que ese mundo es mucho de sobrevivientes, además de que en las empresas se dificulta que las personas puedan ser ellas mismas, debido a la clasificación a las que están sometidas, sostuvo la narradora.

La especialista en violencia de género percibió que las mujeres que han sufrido acoso, abuso o menosprecio deciden no decir nada por no molestar al sistema o ser incómodas. No dicen nada para no ser señaladas.

Recordó que empezó a escribir el libro hace siete años, cuando vivía en Buenos Aires, para impactar con lo que Marta está viviendo y las muchas personas e historias que se meten en el personaje, cómo se siente, se debate y va desaprendiendo, y sigue desafiando el continuo dolor y practica la empatía hacia otras.

Alatriste concluyó que la historia no podía tener un hermoso final feliz en el cual todo se arreglara, pues se habla de que para alcanzar la verdadera libertad e igualdad de género faltan 150 años y es importante recalcarlo por las niñas y mujeres que están haciendo un gran cambio.