Integrantes de la caravana migrante quemaron ayer tres piñatas, una con el rostro del comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, un ratón con las letras INM y la de un encapuchado que personaliza al crimen organizado.

El grupo de extranjeros permanece en Huixtla, Chiapas, desde el miércoles, luego de caminar durante tres días unos 45 kilómetros tras su salida el lunes de Tapachula, en la frontera con Guatemala.

Irineo Mújica, de la organización Pueblo sin Fronteras, que acompaña al contingente, lamentó la desatención de las autoridades migratorias a la crisis humanitaria que padecen miles de personas, incluidas mujeres y niños.

Anunció que el domingo saldrá de Tapachula una nueva caravana para unirse al grupo que ya está en Huixtla y conformar un gran contingente.

Unos mil 500 migrantes quedaron varados desde el jueves en la vías del ferrocarril que van de Torreón, Coahuila, a Ciudad Juárez, a la altura de la termoeléctrica Mápula, en la zona conurbada de la capital del estado de Chihuahua.

Explicaron que personal del Instituto Nacional de Migración y efectivos de la Guardia Nacional pidieron a los maquinistas de Ferromex dejar los vagones en el cambio de vías.

Ante ello, solicitaron ayuda como alimentos, agua y una ambulancia, pues en lo vagones de carga viajan niños y niñas, quienes han presentado enfermedades respiratorias por las bajas temperaturas que se registran en la entidad; acusaron que el personal migratorio no los auxilió y han gastado hasta 12 mil pesos en su trayecto de Tapachula, Chiapas, a Chihuahua, en alojamiento, comida y transporte.

Deportan a menor

El Instituto para las Mujeres en la Migración denunció que ayer, el INM, en un acto de franca violación a los principios de no devolución, interés superior y debido proceso, deportó a una adolescente, originaria de Guatemala, que contaba con una solicitud de asilo presentada ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, pese a que su vida corre peligro en su país.

La menor fue detenida en Acuña, Coahuila, y tenía un amparo contra su deportación, expulsión, retorno, devolución o cualquier figura similar, así como con un caso abierto en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

(Con información de Jessica Xantomila y Jared Laureles)