Bogotá. El presidente colombiano, Gustavo Petro, condenó ayer la violencia xenofóbica desde los medios de comunicación contra personas indígenas y negó ejercer la censura hacia la prensa, un día después de la irrupción forzada de un grupo de personas pertenecientes a pueblos originarios a las instalaciones de la revista Semana, .

“La extrema derecha cree que puede llamar ‘borregos y violadores’ a indígenas y que estos se comportarán como borregos ante estas palabras de violencia étnica y de xenofobia”, escribió el mandatario en un extenso mensaje en la red social X, antes Twitter, en el que alude a la revista.

Petro afirmó que no puede haber violencia xenofóbica de los medios de comunicación porque está prohibida por la Constitución, y no puede haber hostilidad ni censura contra los medios.

Aseveró que si bien jamás ejercerá censura sí se reserva su derecho de réplica y señaló que la democracia informativa exige respeto a la diversidad cultural y al derecho a la expresión que incluye la movilización pacífica del pueblo. Asimismo, solicitó a las fuerzas políticas y sociales del país, el respeto por el otro, la otra. Sin lo cual no es posible la paz y la reconciliación.

Sandra Suárez, gerente de la revista Semana, aseguró en declaraciones a radio Blu que el viernes un grupo de indígenas llegó a las instalaciones del medio, rompieron una puerta y golpearon a un vigilante. Los indígenas, que durante su permanencia en el lugar emitieron arengas contra varios medios de comunicación y contra la revista, salieron cuando la policía llegó.

Suárez añadió que se analizan las medidas legales que adoptarán ante un hecho que emite señales intimidatorias para quienes ejercen esta profesión valiente y necesaria en la democracia, y condenó cualquier forma de violencia. La fiscalía investiga los hechos y presuntos de delitos.

Financiamiento irregular

En este contexto, Nicolás Petro, hijo del presidente, aseguró a la fiscalía del país que su padre sí sabía del dinero irregular para su campaña presidencial por el que está siendo juzgado.

Cuando el fiscal le ha preguntado si el entonces candidato a la presidencia tenía conocimiento de los aportes económicos y la financiación irregular por parte del empresario Euclides Torres, que tiene una contratación con el Estado, Nicolás contestó que Sí. Sabía perfectamente que Euclides era quien financiaba la campaña, informó Semana.