Nueva York. Un juez de Nueva York declaró ayer a Donald Trump y a dos de sus hijos responsables de fraudes financieros continuados al inflar el valor de propiedades y activos de la empresa familiar Trump Organization.

El fallo del juez Arthur Engoron es un revés para el ex presidente, a días de que comience un juicio civil por este caso, el próximo lunes.

Engoron estima que el magnate y sus hijos mayores, Donald y Eric, vicepresidentes ejecutivos de la Trump Organization, son responsables de continuas violaciones a la ley.

La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, quien presentó la denuncia, acusó al multimillonario republicano y a sus descendientes de haber inflado su patrimonio para obtener préstamos bancarios ventajosos y reducir sus impuestos de 2011 a 2021.

La demanda alega que mintieron por años al fisco, a prestamistas y aseguradoras en un esquema que, de forma sistemática, declaró valores erróneos sobre las propiedades de la empresa para enriquecerse.

Engoron también revocó las licencias comerciales que permitían a la Trump Organization explotar algunas de sus propiedades en Nueva York.

La fiscal pide 250 millones de dólares en multas y la destitución tanto del ex presidente como de sus hijos de la dirección del imperio familiar.

La sobrevaluación del patrimonio de los activos de la empresa fue de entre mil 900 y 3 mil 600 millones de dólares cada año, detalló James.

Entre las propiedades erróneamente sobrevaloradas –entre 114 y 207 millones de dólares– está el departamento del ex jefe de la Casa Blanca en la Trump Tower de Manhattan, cuya superficie se ubicó en 2 mil 787 metros cuadrados, cuando en realidad tiene mil 21.

Una discrepancia de esta magnitud sólo puede considerarse fraude, sostuvo el juez.

Trump, favorito para la nominación del Partido Republicano a la presidencia en 2024, calificó el caso de cacería de brujas y tildó a la fiscal, negra, de racista.

El ex gobernante, de 77 años, también enfrenta cargos federales por manejo inadecuado de documentos secretos y de conspiración por tratar de anular los resultados electorales de 2020.

Sobre él también pesan cargos estatales por pagos para comprar el silencio de una actriz porno, y por presiones a funcionarios para anular los resultados a favor de Joe Biden en Georgia.

En tanto, Hunter Biden demandó a Rudy Giuliani y Robert Costello, a quienes acusa de acceder ilegalmente a sus datos, obtenidos del dueño de un taller de reparación de computadoras en Delaware, y difundirlos.