Los trabajadores del sector automotor de Estados Unidos ampliaron su huelga con un claro objetivo: los concesionarios que venden y reparan vehículos de General Motors (GM) y Stellantis. El viernes, al cumplirse una semana de la huelga impulsada por el sindicato United Auto Workers (UAW), unos 5 mil 600 trabajadores se unieron a la protesta y abandonaron 38 centros de distribución y repuestos de ambas compañías en 20 estados.

La venta e instalación de piezas es una de las partes más rentables del negocio automotor, con márgenes de ganancia de 40 por ciento o más, pero también una de las más vulnerables, porque la industria depende de los envíos a tiempo.

Va a ser casi imposible conseguir muchas de estas piezas, dijo Richard Fasulo, técnico de diagnóstico de Wappinger, Nueva York, quien trabaja para un concesionario de la franquicia Cadillac y concesionarios de coches usados.

Definitivamente, va a tener un impacto en los clientes, dijo Thomas Morris, de 60 años, que se declaró en huelga el viernes en un centro de distribución de piezas de General Motors en los suburbios de Filadelfia. El centro sirve a los concesionarios de GM desde Pensilvania a Maine, moviendo unas 30 mil piezas para reparaciones de automóviles cada día, dijeron los trabajadores.

GM afirmó que la empresa tiene planes de contingencia para varios escenarios. En un comunicado, agregó que ha presentado cinco ofertas históricas sobre salarios y seguridad laboral.

Por su parte, Stellantis indicó que hizo una oferta muy competitiva el jueves con la que se les pagaría a todos los empleados de tiempo completo que ganan por hora entre 80 mil y 96 mil dólares en un periodo de cuatro años y siete meses, y permitiría estabilidad en la fuerza de trabajo durante ese tiempo. La empresa dijo que el UAW no ha respondido.

La interrupción del suministro de refacciones tendrá menor afectación por el momento a concesionarias de Ford, ya que, si bien hay discrepancias en algunos temas, la compañía ha hecho concesiones importantes desde que se inició la protesta.

Ford ofrece aumento a sindicato canadiense

Mientras Ford negocia con los trabajadores afiliados al UAW que mantienen un paro en su planta de Wayne, Michigan, la empresa ofreció al sindicato canadiense Unifor aumentos salariales de 25 por ciento en su acuerdo provisional, informó el sábado el sindicato.

El acuerdo prevé un aumento salarial de 10 por ciento durante el primer año, seguido de incrementos de 2 y 3 por ciento durante el segundo y el tercer año, así como una prima de productividad y calidad de 10 mil dólares para todos los empleados en activo de la empresa, informó Unifor, que representa a unos 5 mil 600 trabajadores canadienses del sector automotor.