Aunque se tiene un avance de 92 por ciento, a seis años del sismo de septiembre de 2017 la última etapa de la reconstrucción en la Ciudad de México, a cargo del Instituto de Vivienda (Invi), avanza a cuentagotas, lo que ha impedido el inicio de obras en 2 mil viviendas.

De acuerdo con integrantes del movimiento Damnificados Unidos, que aglutina a 26 edificios, existen casos en los que no se ha logrado demoler los inmuebles; en otros, los predios se encuentran vacíos y en unos más los proyectos comenzaron, pero están detenidos por ajustes en el tamaño y los acabados.

Dalia Martínez, de Pitágoras 316, colonia Narvarte, en Benito Juárez, cuyo inmueble se encuentra a medio demoler, señaló que han logrado que hasta el jefe de Gobierno, Martí Batres, los atienda directamente, pero de ahí no han obtenido mayor avance. Como en todas las reuniones de seguimiento, nos dan nuevas fechas, pero ni las minutas de acuerdos quieren firmar.

En Saratoga 714, colonia Portales, Blanca Eligio comentó que su edificio tiene un avance de 60 por ciento, pero no se han reanudado los trabajos, detenidos desde el año pasado, porque no se ha firmado el convenio modificatorio. No han podido cerrar los programas de obra, los presupuestos, ni han dado los tiempos máximos de pago, expresó.

La falta de proyecto ejecutivo y la ausencia de la empresa constructora que realizará los trabajos son otros de los problemas que enfrentan damnificados de 10 inmuebles ubicados en las alcaldías Cuauhtémoc, Benito Juárez e Iztapalapa.

Además, aseguraron, deben contratar un crédito para cubrir los metros excedentes a los 65 que considera una vivienda de interés social, por el Invi, lo cual nos significa contraer una deuda adicional a la que ya tenemos.

Mencionaron que entre los inmuebles pendientes están el de Doctor Vértiz 1233, Morena 607, Río Tíber 24, Puebla 69, Ámsterdam 219 y 269, y José del Río 91, aunque se tienen otros donde no se ha llevado a cabo la expropiación del predio.

La comisionada para la reconstrucción en la Ciudad de México, Jabnely Maldonado, aseguró que de acuerdo con las proyecciones del Invi, entre octubre y noviembre deberán iniciar las obras en los inmuebles faltantes, con el compromiso de que todos tendrán su contrato y suficiencia presupuestal.

Comentó que a diferencia de las viviendas unifamiliares, el proceso ha sido más complejo en la reconstrucción de edificios porque se elevaron los costos. En algún momento se contrató obra a 12 mil pesos el metro cuadrado, pero se ha llegado hasta 20 mil, y se tuvieron que hacer ajustes a los proyectos, pero no se van a entregar en obra gris o negra y la inversión más grande la está haciendo el gobierno.

De acuerdo con las autoridades capitalinas, de las 22 mil viviendas dañadas por el sismo, 20 mil ya concluyeron o están en obra. La inversión estimada para todo el proceso de reconstrucción es de 17 mil millones de pesos.