La fiscalía pretendía anular al partido
Temen analistas electorales un plan golpista en Guatemala
Sábado 19 de agosto de 2023, p. 21
Guatemala. Culminó ayer la etapa de campañas electorales de la segunda vuelta para elegir presidente en una jornada en la que el choque de instituciones gubernamentales y de justicia mantuvieron al medio político en un ambiente de montaña rusa.
Desde el jueves y esta mañana la cuestionada Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) y la Corte Constitucional redoblaron maniobras para descarrilar la posible llegada de un mandatario ajeno a los clanes del poder que siempre han gobernado este país, Bernardo Arévalo.
En presencia de más de mil 500 observadores electorales de la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea y de la Misión de Observación Guatemala que han expresado preocupación
por la actuación de la fiscalía, los esfuerzos por cancelar al partido Movimiento Semilla, puntero en los comicios, llegó al extremo de anticipar, incluso, procesos judiciales en contra de miembros del Tribunal Supremo Electoral.
Por la noche, un comunicado de la Corte Suprema de Justicia, anunciando que otorgaba un amparo definitivo a Semilla, devolvió el golpe al titular de la FECI, Rafael Curruchiche. Esto, como primer efecto, elimina la resolución judicial que pretende anular la personalidad jurídica del partido de Arévalo. Esto obligó al presidente Alejando Giammattei a declarar que su gestión terminará como previsto el 14 de enero y que él garantiza una transición ordenada y transparente
. Por lo tanto, se pone en pausa, por ahora, la ruta de crisis que se trazó desde que Semilla logró pasar a la segunda vuelta electoral el 25 de junio. Después de allanar dos veces al partido, incautar ilegalmente documentos e intentar la inhabilitación del organismo político, la FECI anunció que podría incluso emitir órdenes de aprehensión en contra del candidato y sus principales colaboradores por haber encontrado cerca de 600 afiliados con nombres falsos, entre ellos ocho personas ya difuntas. La fiscalía no ha presentado pruebas de lo anterior pero esto permite ver tres escenarios posibles para la crisis poselectoral.
No deja de sacar trucos de su chistera de mago
, dice a este periódico el analista Frank La Rue.
En su ponderación, hay un horizonte de golpe de Estado. Defensor por la libertad de expresión y los derechos humanos desde hace décadas y actualmente al frente de la Convergencia Nacional para la Reforma Política, La Rue describe los pasos de esta estrategia de desestabilización. Plan A, hasta el domingo (mañana): hacer que Sandra Torres gane. Nos han reportado que el dinero ha fluido a raudales en la compra de votos. Y están redoblando esfuerzos para debilitar al máximo al Tribunal Supremo Electoral (TSE).
La presión de una investigación judicial por haber encontrado, presuntamente, a digitadores en este proceso electoral que eran militantes de Semilla, se extendió a funcionarios del TSE. Para evitar ser detenidos por lo anterior, su directora financiera y el director de informática renunciaron la mañana de ayer al organismo.
“Pero si la votación es muy copiosa y el margen de ventaja de Arévalo es arriba de 60 por ciento (como pronostican las encuestas recientes) no podrán impedir su victoria –continua La Rue–. Entonces, hay un plan B: el lunes mismo dejarán caer una cascada de impugnaciones para intentar anular la elección y continuar también con la judicialización por las supuestas firmas falsas, pero reclasificando esta falta como crimen organizado”.
Advierte que esto puede llevar a la cárcel a varios dirigentes de Semilla e incluso quitarle el fuero a Arévalo y también encarcelarlo. La finalidad sería disolver el partido. Al declarar a Semilla no existente
ya no habría ni candidatos ni ganadores. De esta forma podrían impedir antes del 31 de octubre la declaratoria del triunfo de Arévalo”.
Una fecha clave es el 14 de enero, la toma de posesión del nuevo presidente electo. Pretenden socavar al gobierno, aislarlo, dejarlo sin partido, sin bancada en el Parlamento y por lo tanto sin presupuesto y con todas las cortes fieles a Alejandro Giammattei en su contra”.
No sólo La Rue y otros de los observadores electorales desplegados para los comicios del domingo comparten el temor de estos escenarios. El ex candidato Álvaro Arzu, hijo de otro ex presidente del mismo nombre, divulgó en sus redes su propio análisis en donde añade un colofón:
“Van a buscar anular no sólo a Semilla sino a otros dos partidos más, Vos y Cabal, para que no digan que van contra uno solo. Logran el desafuero y el arresto de Arévalo, pero no sube Sandra Torres a la presidencia, sino que nombran a una junta directiva en el Parlamento. Ya hasta tienen el nombre de quién la presidirá: Alan Rodríguez. Será él quien reciba la banda presidencial de Giammattei.
Luego, como presidente interino, propone una terna para que el Congreso elija al presidente que gobernará Guatemala los cuatro años siguientes. De esta forma, ni siquiera tendrán que convocar a nuevas elecciones
, finaliza el mensaje Arzú.