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Vecinos las sufrieron por años

Liberan autoridades la calzada Coltongo de miles de tarimas abandonadas

Admiten que fueron semanas de negociaciones con comerciantes para convencerlos de retirarlas

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▲ Autoridades retiraron 7 mil tarimas de madera que apiladas alcanzaban una altura de tres metros, las cuales bloqueaban dos carriles de la calzada Coltongo, en la alcaldía Azcapotzalco.Foto La Jornada
 
Periódico La Jornada
Miércoles 9 de agosto de 2023, p. 30

A casi un año de que vecinos exigieron retirar miles de tarimas abandonadas de la vía pública en el barrio de Coltongo, alcaldía Azcapotzalco, ayer fue liberada la calzada del mismo nombre.

En total, informó el Gobierno de la Ciudad de México, fueron removidas 7 mil piezas de madera instaladas en la banqueta y el arroyo vehicular.

La mayoría de las tarimas, precisó, fueron retiradas de manera voluntaria en los días recientes por quienes se dedican a la venta de dicho material, y ayer por la mañana, personal de las secretarías de Obras y Servicios, de Gobierno y de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, además de la alcaldía Azcapotzalco, quitaron más de 100 tarimas que permanecían en la zona.

La administración capitalina admitió que fueron semanas de negociaciones para convencer a los comerciantes del retiro, con lo que se cumple la petición ciudadana para el disfrute de las calles y banquetas por todos los habitantes de la Ciudad de México y, en este caso, de Azcapotzalco.

Se trata de un caso que los vecinos sufrieron por varios años sin que las autoridades tomaran cartas en el asunto, pero desde septiembre de 2022 se incrementaron las quejas por la obstrucción de las banquetas y el arroyo vehicular, aunado a problemas de seguridad, accidentes, ruido y tráfico provocados por la acumulación de la madera, según denuncias de los colonos, como un incendio en enero del año pasado, así como viales por la obstrucción de al menos un carril de la calzada y la banqueta, que obligaba a los transeúntes a caminar por el arroyo.

La madera estaba apilada hasta en cuatro columnas de más de tres metros de altura, y ocupaba dos carriles de la calzada Coltongo.

Con el argumento de que no tenía capacidad para resolver por sí sola el problema, además de no contar con personal, vehículos y espacio suficiente para el retiro de las tarimas, la alcaldía pidió el apoyo del gobierno central.