Lunes 31 de julio de 2023, p. 30
En la Ciudad de México se decomisan en promedio 33 especies silvestres al día, algunas en peligro de extinción, provenientes del Bajío, la Huasteca y el sur del país.
De acuerdo con información obtenida vía transparencia, de enero de 2019 a junio de este año se logró rescatar a 72 mil 821 animales, entre reptiles, anfibios, aves, mamíferos y primates, en operativos realizados por la Procuraduría Federal de Medio Ambiente (Profepa), la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México y la policía capitalina.
Ernesto Zazueta, representante de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México, expresó que la capital del país se ha convertido en el principal centro de distribución de estas especies, como da cuenta la magnitud de los decomisos realizados por las autoridades, que sólo en mayo pasado recuperaron mil 500 aves, como pericos australianos, tucanes, cotorros, loros y ninfas, así como dos monos capuchinos.
Destacó que durante la pandemia este ilícito creció de manera exponencial, como muestran los datos de la Profepa, que durante 2020, en seis operativos aseguró 65 mil 530 ejemplares, cifra muy por arriba del año anterior, cuando se rescataron 2 mil 492 animales.
En entrevista, dijo que se estima que de 100 por ciento de animales que se trafican, sólo 20 por ciento sobrevive, sin que se cuente, por parte del gobierno, con espacios suficientes para su rehabilitación y resguardo, por lo que la gran mayoría son atendidos en los zoológicos de la asociación sin ninguna remuneración, a pesar de lo oneroso que resulta.
A decir del investigador emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México, Antonio Lazcano Araujo, el comercio ilegal de especies silvestres, ya sea para consumo o para mascotas, se debe frenar, no sólo para la conservación de estos ejemplares, sino por el riesgo que conlleva para la humanidad, pues hay un factor que no se toma en cuenta, pero no es trivial.
“Cuando adquieres un animal silvestre estás comprando virus, microrganismos, parásitos que ellos traen, y existe el riesgo de zoonosis –enfermedad de animales transmitida a humanos–, lo que es grave tanto para las personas como para el entorno”, expuso.