Residentes enfrentan décadas de negligencia
Aquí mueren de cáncer hasta los perros
// Activistas luchan por convertir la zona afectada en eje de nuevos empleos basados en tecnología ecológica
Jueves 15 de junio de 2023, p. 21
Los Ángeles. Yo tuve cáncer, mi hijo tuvo cáncer, mi perro tuvo cáncer
.
Con estas palabras una residente de esta comunidad de Wilmington, dentro de la ciudad de Los Ángeles, rodeada de cinco refinerías debajo de las cuales está la tercera reserva de petróleo más grande de Estados Unidos, concluyó su declaración en una reunión comunitaria reciente y exigió saber cómo un funcionario de la Agencia de Protección Ambiental Federal (EPA, por sus siglas en inglés) pensaba abordar décadas de negligencia y contaminación en su comunidad y ofrecer los empleos, servicios de salud y vivienda que tanto necesitan.
Esta mujer fue una de unos 40 residentes en Wilmington que se congregaron en una pequeña sala de eventos para una reunión de dos horas con el funcionario de la EPA organizada por Magali Sanchez-Hall, del Movimiento EMeRGE, junto con el reverendo Nelson Rabel de la iglesia luterana Sta. Maria Peregrina. El gobierno de Joe Biden está otorgando miles de millones de dólares para asistir a comunidades locales y se ha comprometido a que por lo menos 40 por ciento de estos fondos sean destinados a comunidades pobres que han sido golpeadas por contaminación y otros problemas ambientales.
El funcionario de la EPA, usando una presentación power-point con tipografía que era demasiado pequeña para que estos reporteros alcanzaran a descifrar, ofreció un resumen soporíficamente detallado de los esfuerzos y programas de su agencia dedicados a comunidades tan necesitadas y vulnerables
como Wilmington.
Aunque algunos de los residentes se hallaban al borde del sueño, otros estaban decididos a no permitir que el funcionario se escapara tan fácilmente. Nuestra comunidad ha sido devastada por la contaminación ambiental. Cinco refinerías y la contaminación de los camiones que van y vienen del puerto (de Los Ángeles). La mitad de mi familia ha muerto de cáncer
, declaró Robert Santos, director de la Organización Unida de la Juventud de Wilmington. Agregó, ante el aplauso de aprobación de los demás, que las agencias médicas locales son cómplices de las refinerías. ¿Ustedes qué van a hacer al respecto?
El profesor Raúl Hinojosa-Ojeda de la Universidad de California en Los Ángeles, reporta que, como suele ser el caso, esta área de 37 kilómetros cuadrados en Los Ángeles es el barrio de algunos de los residentes más pobres y marginados de esta metrópolis. Casi 90 por ciento de esta población se identifica como latina y cerca de la mitad de los mayores de 25 años no han egresado de la preparatoria. El ingreso medio de los hogares es la mitad del ingreso de la colonia muy cercana de Rancho Palos Verdes, donde las casas tienen vistas al mar y Donald Trump tiene un campo de golf con su nombre.
En una investigación para el Departamento de Agua y Fuerza de Los Ángeles, Hinojosa-Ojeda y Sánchez-Hall documentaron los peligrosamente altos niveles de contaminación aérea y registraron que la tasa de cáncer ahí es la más alta de todo Los Ángeles.
En entrevista con La Jornada, Hinojosa-Ojeda dijo estar inspirado por la manera en que esta comunidad tan vulnerable se ha unido para demandar el cambio, algo que se manifestó a lo largo de la reunión comunitaria. Los activistas locales Santos y Sánchez-Hall han trabajado juntos con la finalidad de establecer una organización comunitaria que ya ha logrado obtener 3 millones de dólares en fondos federales para desarrollar programas para abordar la contaminación y empezar a a generar empleos verdes
para los residentes.
De hecho, Hinojosa-Ojeda y Sánchez-Hall detallaron en su investigación cómo la colonia de Wilmington podría convertirse en un eje de nuevos empleos basados en tecnología ecológica. El concilio de la ciudad se ha comprometido que para 2035 toda la energía empleada por la ciudad provendrá de fuentes de energía renovable.
Es hora de escuchar, aprender e implementar lo que comunidades indígenas, migrantes y de primera línea presenten soluciones ante los efectos rurales del cambio climático, como la transición hacia empleos verdes en zonas urbanas
, explica Hinojosa-Ojeda. El profesor de la UCLA estará invitando a activistas de Wilmington para la próxima cumbre ambiental mundial que se realizará en Egipto, donde se sumarán a otras comunidades vulnerables y de primera línea de varias partes del mundo que buscan tomar el control de sus destinos y ser participantes en abordar la crisis ambiental.