Martes 23 de mayo de 2023, p. a10
Madrid. Vinicius Junior considera que se ha llevado una sorpresa desagradable
en cada partido de LaLiga y asegura que no son casos aislados
, sino episodios continuos en varias ciudades de España
, lamentando que no se estén tomando medidas ni contra los implicados ni contra los clubes pese a las reiteradas denuncias que ha presentado.
Deseos de muerte, un muñeco ahorcado, muchos gritos criminales... Todo registrado
, señaló el delantero brasileño en su cuenta oficial de Instagram, acompañado de un video de varios sucesos que ha sufrido durante esta campaña como antes del derbi, en Valladolid o en el Camp Nou.
No, no son casos aislados. Son episodios continuos repartidos por varias ciudades de España (e incluso en un programa de televisión)
, subrayó, recalcando que las pruebas
están grabadas.
¿Cuántos de estos racistas tenían nombres y fotos expuestos en sitios web? Respondo para hacerlo más fácil: cero. Ninguno para contar una historia triste o hacer esas falsas disculpas públicas. ¿Qué falta para criminalizar a estas personas? ¿Y castigar deportivamente a los clubes? ¿Por qué los patrocinadores no cobran a LaLiga? ¿No se molestan las televisiones en retransmitir esta barbaridad todos los fines de semana?
, se pregunta.
Vinicius, quien el domingo exigió al árbitro hacer algo ante las injurias y casi al final del partido salió expulsado, afirmó que el problema es muy grave
y que los comunicados ya no funcionan. Tampoco el culparme para justificar actos delictivos. No es futbol, es inhumano
, sostuvo el jugador del Real Madrid.
El club merengue reclamó a las autoridades que investiguen los abusos. La imagen del futbol español está gravemente dañada y deteriorada a los ojos de todo el mundo
, y agregó que la Federación de ese país, con su pasividad, ha contribuido al desamparo y a la indefensión
de Vinicius.
Estos hechos constituyen un ataque directo al modelo de convivencia de nuestro Estado social y democrático de derecho.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, tiene claro que hay que dejar de hablar
y empezar a actuar
ante el racismo en los campos de futbol, pidiendo prohibir el acceso a cualquier estadio del mundo a quienes cometan actos racistas, que se les finquen responsabilidades y sanciones penales, y también solicitando la pérdida de puntos para los equipos cuyos aficionados se comporten de esta manera.