Es segunda causa de muerte en la región
Si no se trata, puede provocar problemas cardiacos, insuficiencia renal y ceguera, advierte
Miércoles 17 de mayo de 2023, p. 17
En el contexto del Día Mundial de la Hipertensión, que se conmemora cada 17 de mayo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó que la enfermedad cardiovascular se mantiene como la primera causa de muerte en las Américas, mientras la hipertensión representa 50 por ciento de los casos.
Destacó que 25 por ciento de las mujeres adultas y 40 por ciento de los varones padece esta enfermedad sin saberlo, la cual es considerada un asesino silencioso
, debido a que en sus primeras etapas rara vez provoca síntomas, y un elevado número de personas no son diagnosticadas.
El organismo multinacional señaló que en la región se estima que 180 millones de personas ya son hipertensas. Sin embargo, subraya que de quienes cuentan con un diagnóstico y tratamiento, sólo 36 por ciento mantiene el padecimiento bajo control.
La organización panamericana destaca que la hipertensión es una afección que si no se trata, puede provocar ataques cardiacos, insuficiencia cardiaca, accidente cerebrovascular, insuficiencia renal y ceguera. Los factores de riesgo asociados, además de edad avanzada, es sobrepeso u obesidad, falta de actividad física, alto consumo de sal/sodio y de alcohol.
En las Américas, indica, este mal ocasiona la pérdida de dos millones de vida cada año, pues se estima que uno de cada seis latinoamericanos la padece. A ello se suma que en América Latina la población adulta consume, en promedio, 8.5 gramos de sal al día, es decir, 1.7 veces más que los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud, que establece un límite de cinco gramos diarios.
Con sobrepeso y gordura, 65% de habitantes de la zona
Otro de los riesgos que elevan la incidencia de la enfermedad en la región es que 65 por ciento de sus habitantes sufre de sobrepeso y obesidad, el nivel más alto de todas las regiones de la OMS. Además, las Américas se clasifica con la mayor inactividad física de su población a nivel mundial. Alertó que durante la pandemia de covid-19 se complicó aún más el acceso a servicios de salud para el tratamiento de la hipertensión, principalmente debido a la saturación o interrupción de atención en el primer nivel.
Agrega que en las Américas sólo 12 de 35 naciones reportaron servicios ambulatorios que funcionan adecuadamente para pacientes con enfermedades no transmisibles.
Por ello, recordó que a fin de hacer frente a los desafíos que impone este mal crónico, el cambio en el estilo de vida y el uso de medicamentos antihipertensivos de por vida son esenciales para reducir y controlar la incidencia de esta enfermedad.