Lunes 3 de abril de 2023, p. 28
El papa Francisco, quien estuvo hospitalizado la semana pasada por una bronquitis, agradeció ayer a los fieles las oraciones por su salud tras presidir la misa del Domingo de Ramos en la plaza de San Pedro. ¡Gracias, de verdad!
, expresó ante la multitud el pontífice argentino, de 86 años, apenas un día después de haber sido dado de alta. En su primera aparición pública, el pontífice se veía pálido y su voz era algo ronca. De pie, bendijo primero miles de ramos de olivo y palma, rito de los creyentes en recuerdo de la entrada de Jesucristo a Jerusalén. Durante la homilía denunció la soledad y el abandono que sufren los enfermos. Al término de la ceremonia recorrió la plaza en el papamóvil para saludar a los fieles.